Más de 18.000 familias canarias, clientes de Endesa, se han beneficiado de la renovación automática del bono social desde que se acodó en el mes de abril, informa la compañía.

Esto sitúa la cifra de beneficiarios de esta ayuda en casi 33.800 hogares, unos 3.000 más que a 31 de diciembre de 2021 y 8.000 más respeto al año en que estalló la pandemia, se indica en un comunicado.

En la provincia de Las Palmas son 18.098 y en la provincia de Santa Cruz de Tenerife son 15.722.

Endesa atribuye buena parte de este crecimiento al hecho que todas aquellas personas beneficiarias de este descuento —salvo las familias numerosas, que están sujetas a la vigencia de su carné— no tengan que tramitar ahora una solicitud de renovación cada 2 años para verificar que siguen cumpliendo los criterios de asignación definidos por el Gobierno.

Desde la energética se hace directamente la comprobación con el Ministerio de Transición Ecológica para saber si el hogar en cuestión puede seguir percibiendo el descuento en la factura eléctrica.

Para aquellos que gozaban de la ayuda antes de la entrada en vigor de la normativa tendrán una prórroga automática de dos años tras finalizar el período de percepción.

Dos meses antes del siguiente vencimiento, Endesa les avisará para que puedan presentar la solicitud y la nueva documentación acreditativa de acuerdo con los nuevos requisitos.

A partir de ese momento las renovaciones también pasarán a ser automáticas cada dos años, siempre que se cumplan las condiciones.

Más allá de las renovaciones, Endesa prevé que el colectivo de beneficiaros del bono social siga creciendo en los próximos meses con la nueva categoría que el Gobierno impulsó a finales del mes pasado, el bono social de justicia energética, dirigido a hogares con bajos ingresos particularmente afectados por la crisis energética.

Esta nueva categoría supone la aplicación de un descuento del 40% sobre el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2023.

Podrán acogerse a esta ayuda para su vivienda habitual las personas que tengan una renta igual o inferior a 2 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) de 14 pagas y superior a 1,5 veces el IPREM de 14 pagas.

También se amplían los descuentos y los prorroga hasta 31 de diciembre de 2023.

Así, para los consumidores vulnerables la ayuda pasa del 60% al 65%, mientras que para los que se encuentren en situación de vulnerabilidad severa se amplía en un 10% más, pasando del 70% al 80%.

Además, también se incrementa el número de kilovatios hora (kWh) sobre los que se aplican estas bonificaciones, por lo que el volumen de energía anual sujeta al descuento se incrementa en un 15% y de forma proporcional a las personas que convivan en la misma vivienda.

Igualmente, se ha aprobado un aumento en la ayuda mínima por beneficiario del bono social térmico de 25 a 40 euros, para ayudar a consumidores vulnerables en consumos térmicos como calefacción, agua caliente o cocinas de gas.

Esta ayuda se concede de forma automática a todos los beneficiarios de bono social eléctrico –con la excepción de la nueva categoría de bono de justicia energética –.