El equipo a cargo de la misión de la NASA Artemis I, que tiene como objetivo preparar el camino para la exploración lunar, dio luz verde al intento de lanzamiento previsto para este miércoles desde el Centro Espacial Kennedy de Cabo Cañaveral (Florida) luego de revisar los últimos datos.

La ventana de dos horas para el quinto intento de lanzamiento de la misión se abre a las 6.04 horas de la Península del miércoles, según confirmaron los ingenieros de la NASA en una rueda de prensa este lunes por la noche.

"Revisamos la configuración de nuestro vehículo desde la parte superior de la nave espacial hasta la parte inferior del cohete, incluidos el sistema de terminación de vuelo y las baterías que ya reiniciamos", dijo en una teleconferencia Jim Free, administrador asociado de la NASA para el desarrollo de sistemas de exploración.

Igualmente, según indicaron los responsables de la misión, se solventaron definitivamente una serie de problemas derivados del paso del huracán Nicole por Cabo Cañaveral la semana pasada, que obligó a retrasar el intento de lanzamiento anterior, previsto para este lunes.

El equipo de sellado del sistema para abortar un lanzamiento quedó suelto a causa del embate de los vientos de Nicole sobre la plataforma del centro espacial donde se encuentra el enorme y costoso cohete SLS con la cápsula Orion en la punta.

Según el blog de la misión, los ingenieros examinaron detalladamente "la masilla en una costura entre una ojiva en el sistema de aborto de lanzamiento de (la nave) Orion y el adaptador del módulo de tripulación" y los riesgos potenciales si se desprendiera durante el lanzamiento.

Los ingenieros determinaron que "existe una baja probabilidad de que, si se desprende material adicional, represente un riesgo crítico para el vuelo", indicó la agencia espacial estadounidense.

El objetivo de esta misión no tripulada es poner a prueba las capacidades del cohete SLS y de la nave Orión antes de un viaje tripulado previsto, en principio, para 2024.

El cohete SLS, con una altura superior a un edificio de 30 plantas (322 pies o 98 metros), ha costado a la NASA unos 4.000 millones de dólares.

La NASA ha tenido que retrasar cuatro veces la partida de la misión, dos por razones técnicas y otras dos por causas meteorológicas.

El objetivo general del programa Artemis de la NASA es devolver a los humanos a la luna por primera vez en medio siglo y la misión Artemis I, que se espera que sea la primera de muchas, sentará las bases, probando el cohete y la nave espacial y todos sus subsistemas para garantizar que sean lo suficientemente seguros para que los astronautas vuelen a la luna y regresen.