El mensaje ES-Alert, la prueba piloto para avisar a ciudadanos de que en la zona donde están existe una situación de emergencia y deben tomar la precauciones necesarias, se probó a mediodía de ayer en los municipios de Garachico, en Tenerife, y Valleseco, en Gran Canaria. La experiencia desarrollada en la localidad del noroeste tinerfeño funcionó solo a medias. Y es que la alerta llegó a algunos vecinos, trabajadores, visitantes y turistas, pero a otros no. No obstante, en general, los responsables de Emergencias se mostraron satisfechos y analizan los errores para mejorar la eficacia en los próximos meses.

De forma periódica, el frente costero del casco urbano de Garachico se ve afectado por el «mar de leva», o lo que en lenguaje técnico se conoce como fenómenos costeros. Es decir, un fuerte oleaje que invade la avenida Adolfo Suárez (la travesía de la principal carretera de la comarca, la TF-42) y en los peores episodios causa daños materiales en mobiliario urbano y edificaciones situadas en la mencionada vía.

Algunas personas esperaban ese aviso, en base a las informaciones divulgadas en medios de comunicación y redes sociales, pero otras se enteraron minutos antes del mensaje e, incluso, otras lo hicieron sobre la marcha. En el quiosco de la plaza de la Libertad, una vecina de Santa Úrsula y su madre, residente en el Puerto de la Cruz, se toman un café. La hija sí recibió la alerta a las 12:07 horas. Pero a su progenitora no le llegó. Ambas se preguntaban si el motivo es que el terminal estaba apagado y que no es un terminal con acceso a internet, sino de los «antiguos».

Varios de los turistas sentados en las mesas de dicho establecimiento sí recibieron el aviso. En algunos casos, junto al mensaje en español, una voz explicaba el motivo del aviso en inglés. En un departamento del Ayuntamiento de Garachico se hallaban cinco trabajadores. Tres de ellos recibieron el mensaje y otros dos no. Un policía local, Alejandro Álvarez, señaló que la inmensa mayoría de quienes recibieron los avisos tiene como operadora a Movistar, mientras que los clientes de otras compañías no fueron alertados en el simulacro.

A las 12:07 horas, en la emblemática Glorieta de San Francisco, sede de relevantes actos culturales y festivos, había numerosos turistas que realizaban una visita a la villa y puerto. Por esa razón, el concejal de Seguridad, Andrés Hernández, salió del consistorio y se aproximó a ellos minutos antes de la hora prevista de aviso. «A las 12:09 minutos empezaron a sonar algunos, no todos», dijo. En ese momento, en dicho enclave había dos excursiones turísticas, indicó el edil. Y en ese momento, un policía local y el propio edil informaron a dichas personas de que no ocurría nada grave y que solo consistía en una prueba. Andrés Hernández considera que «esta es una herramienta muy útil para alertar, por ejemplo, del mar de leva o fenómenos costeros», para que ciudadanos, turistas, trabajadores y dueños de negocios actúen en consecuencia y evitar riesgos personales; «aparte de cuando ocurra una gran emergencia». Para el concejal, es un recurso «que va a ayudar y que ya funciona en otros países».

Tras los primeros minutos, en la Policía Local tampoco se recibieron preguntas angustiosas por el mensaje. Dos vecinos del casco, que dijeron ser de Movistar, tampoco recibieron la alerta. En cambio, otro joven de 23 años y su novia, clientes de Vodafone, sí fueron receptores del aviso. Ambos utilizan el sistema operativo Ios.

Fuentes de la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Ejecutivo autónomo indicaron que «en Garachico hubo una operadora de telefonía que falló y se ha detectado ya el problema». En su cuenta de la red social Twitter, dicho departamento del Gobierno canario aseguró que «la prueba del ES-Alert se entendió de forma correcta y no generó alarma entre la población»; de hecho «el 1-1-2 no recibió llamadas» en relación con este asunto. «Ahora toca analizar los resultados de la recepción de la alerta en los distintos terminales móviles y compañías telefónicas», planteó dicha área de la administración regional.

El Gobierno canario desea obtener más información de los usuarios, para lo que invita a rellenar una encuesta, en la que aparecen las siguientes preguntas: ¿Ha recibido el aviso? ¿Dónde estaba? ¿Qué hacía cuando lo recibió? ¿Cuál es su operador de telefonía móvil?¿Cuál es el sistema operativo de su terminal?¿Llamó la atención lo suficiente el pitido acompañado de vibración del aviso? ¿Qué claridad tuvo el mensaje?¿Conocía con antelación el calendario de la prueba? y ¿Qué opinión le merece el sistema?

Participantes del proyecto Life Garachico P.F.

El proyecto Life-Garachico busca minimizar daños materiales y evitar víctimas ante el «mar de leva» que se registra en Garachico de forma periódica, así como que, tras un episodio de este tipo, la población pueda recuperarse de la mejor manera y en el menor tiempo posible; es decir, lo que en los últimos años se define como resiliencia. Así lo explica, Carla González Cruz, investigadora de campo de dicha iniciativa, que está impulsada por la Universidad de La Laguna, Instituto Hidráulica de Cantabria, Grafcan, Tragsa, E-littoral, el Gobierno canario, el Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de Garachico.

Curiosamente, varios profesionales vinculados a este proyecto realizaron ayer un recorrido por la avenida Adolfo Suárez y, ya por la tarde, celebraron un encuentro con vecinos para conocer sus inquietudes y necesidades, así como para que estos pregunten por las acciones que les brindará Life-Garachico.

La coordinadora de la experiencia, Laura Comes Aguilar, explicó que la iniciativa se empezó a desarrollar en octubre del pasado año y en febrero se comenzó a preguntar a los vecinos y empresarios para conocer su percepción del mar de leva, gracias a encuestas, entrevistas y un taller durante el Ficmec (Festival Internacional de Cine Medioambiental de Garachico). Comes y González Cruz indican que se han hecho 71 fichas de entrevista, nueve entrevistas individuales y 437 encuestas.