La España vaciada es un problema que está afectando a muchas poblaciones rurales de la Península. Es un hecho, una realidad que se podría revertir ahora que está tan demoda el teletrabajo y los nómadas digitales. Ya no hace falta tener muchos servicios cercanos, sino una buena conexión a internet y algún pueblo algo más grande no más allá de una hora de camino en coche para resolver urgencias o comprar en un supermercado o farmacia. La calidad de vida que ofrecen muchos de estos pueblos es un atractivo que muchos empiezan a sopesar no solo como un atractivo añadido, sino como un elemento más para ganar en salud y alejar el estrés que muchas veces provoca a quienes vivien en las grandes urbes o capitales de provincia.

Se vende un pueblo en Zamora por 260.000 euros

Pues hay pueblos que quieren revivir y que están a la venta a un precio irrisorio si se tiene en cuenta lo que cuesta un piso en cualquier ciudad española. Y esto es lo que sucede con Salto de Castro, un pueblo de Zamora qe fue abandonado hace algún tiempo y que ha salido a la venta por 260.000 euros, una auténtica ganga porque este núcleo -que pretende volver a ser poblacional- cuenta con 44 casas, una escuela, piscina e, incluso, tiene un cuartel de la Guardia Civil.

Este es el anunicio publicado en Idealista que ha dejado perplejos a muchos. ¿Quién no ha soñado alguna vez huir de la ciudad, mudarse a la montaña y empezar de cero? Comprar una casa, tener un jardín, poder practicar deportes rurales cuando quiera… Pues es un sueño que puede cumplirse, y por poco más de lo que te costaría un piso pequeño en una ciudad como Madrid o Barcelona. Salto de Castro está a la venta en su totalidad en Idealista por 260.000 euros.

El pueblo pertenece a una familia que lo compró a principio de la década de 2000 a Iberdrola. Dedicada al turismo, la familia vio cómo sus planes se truncaban con la crisis de 2008, y su proyecto de convertir esta aldea en un pueblo dedicado al turismo se truncaba.

Cuartel de la Guardia Civil, escuela, iglesia y bar

Ahora, con la familia ya retirada del circuito de los negocios en España, quiere pasar el testigo a otros emprendedores, y de ahí su venta. Este pueblo, pegado a un embalse y fronterizo con Portugal, cuenta con 44 viviendas, de las cuales cinco son independientes.

Tiene también un bar, una iglesia, y una escuela con varias aulas, así como una hospedería con proyecto para ejecutar 14 habitaciones, con salón comedor y lavandería. Según los propietarios, se podría adquirir una licencia para albergar 184 plaza de turismo rural.

Se vende un pueblo en Zamora por 260.000 euros

También hay un antiguo cuartel de la Guardia Civil, un piscina y zonas deportivas. Además de un embalse a escasos metros donde se podría, incluso, poner en marcha un barco turístico.

Según los propietarios, la persona que adquiera el pueblo tendrá acceso a subvenciones Estatales y por parte de la Junta de Castilla y León. Además, según un estudio previo elaborado por los propietarios, la inversión que necesitaría el pueblo para estar 100% operativo y empezar a ser rentabilizado no supera los 2 millones de euros.