La calima se mantendrá instalada en Canarias al menos hasta el miércoles. Tan solo unos días después de que el Archipiélago se adentrara de forma abrupta en un lluvioso otoño, la recurrente masa de aire sahariano que parte desde África, ha relegado las copiosas precipitaciones a un segundo plano y devuelto el recuerdo del caluroso periodo estival a los canarios.
La calima se ha asentado en las zonas altas de la atmósfera y en medianías –por encima de la capa de inversión térmica– reduciendo la visibilidad y empeorando la calidad del aire en la mayoría de las Islas. De hecho, según los datos proporcionados por la red de calidad del aire del Gobierno de Canarias las concentraciones alcanzaron en algunos momentos del día los 500 microgramos por metro cuadrado en el aire, lo que corresponde a un ambiente «extremadamente desfavorable».
Por su parte, las temperaturas superaron los 30 grados en varios lugares de la geografía canaria según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Fue la Aldea de San Nicolás, en Tasarte (Gran Canaria) la que registró una temperatura más alta, de 33,2 grados centígrados durante la jornada. Le siguió el aeropuerto de Lanzarote, donde se alcanzaron los 32,1 grados de máxima al mediodía. Tejeda y San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria) y Pájara(Fuerteventura) cierran este ranking de calor.
El polvo sahariano seguirá presente en la jornada de hoy, en la que se esperan, intervalos nubosos de nubes medias y altas con predominio de los cielos nubosos durante la segunda mitad del día.
El viernes las temperaturas bajarán hasta los 25 grados de máxima y los 22 de mínima
Se espera, asimismo, según la Aemet, algún chubasco ocasional en la zona de Las Cañadas, principalmente por la tarde. En Lanzarote y Fuerteventura, los cielos estarán poco nuboso con intervalos de nubes altas. Por su parte, las temperaturas se mantendrán en ligero a moderado ascenso, siendo más acusado el de las mínimas en las zonas de interior de las islas de más relieve, que podrán alcanzar los 23 grados. Las máximas se situarán entre los 27 y los 28 grados.
Este miércoles, la calima irá abandonando el Archipiélago poco a poco. Será mucho más ligera que en días anteriores y, además, irá remitiendo con el transcurso de la tarde. El cielo se despertará nuboso, pero irán abriéndose grandes claros a medida que el polvo sahariano abandone las Islas y empiece a soplar el alisio con más fuerza.
De esta manera, para la tarde se espera que aumente la nubosidad baja en las vertientes norte. La retirada de la calima también propiciará que desciendan las temperaturas, siendo esta bajada de los termómetros más acusada en medianías y las cumbres del norte de las Islas. El jueves volverán las lluvias, pero serán, según la Aemet, «débiles, ocasionales y dispersas» y tan solo en las islas de mayor relieve. Las temperaturas descenderán algo más, hasta alcanzar los 25 grados de máxima y los 22 de mínima. Esta previsto que esta situación se prolongue hasta la próxima semana.
