Los vecinos de Vigo y su comarca afrontan la jornada de este domingo rodeados de un insoportable olor a humo y con un cielo grisáceo sobre sus cabezas en pleno domingo de alertas por intenso calor. El incendio de Arbo, originado ayer, es actualmente el más preocupante en cuanto a su extensión y por la proximidad de las llamas a las viviendas, aunque ya se encuentra "controlado", en palabras de su alcalde, Horacio Gil. A este se suman dos desde las últimas horas. Uno, en la parroquia de Padróns, en Ponteareas, registrado alrededor de las 23.15 horas del sábado, con una superficie afectada de 20 hectáreas y ya estabilizado desde las 10.00 h de hoy aproximadamente. El otro, en la parroquia de Oroso, en A Cañiza, nacido a las 1.00 h de esta pasada madrugada, y en el que hasta hace escasos minutos, estaba activada la situación 2 de alerta por la cercanía del fuego al polígono industrial de Ribadil, concretamente a una nave de reciclaje de plásticos.

Este último, que ya ha calcinado 25 hectáreas —en su mayoría de monte raso—, ha obligado a cortar durante unas horas esta mañana la transitada A-52 a su paso por el municipio, siendo redirigidos los vehículos por la N-120. Sobre las 11.00 horas, se reabrió la autovía das Rías Baixas y, al mismo tiempo, se cerró la N-120 en ambos sentidos, concretamente en el kilómetro 612, por la presencia de humo y polvo. Finalmente, la vía nacional fue reabierta sobre las 14.10 h quedando todos los accesos disponibles. "La situación del incendio no es muy peligrosa, pero por seguridad los técnicos realizaron un contrafuego", han informado a FARO fuentes de la Guardia Civil de Tráfico. Por otro lado, Luis Piña, alcalde de la localidad, ha adelantado que desde el mediodía la situación "está relativamente controlada" y sospecha que detrás de este suceso pueda estar la mano de los incendiarios: "Hubo un primer foco que se contuvo pasadas las 22.00 h, pero sobre las 1.00 h aparecieron otros dos y el de Oroso se descontroló. Que hayan ardido tres puntos distantes y de manera casi sincronizada es muy sospechoso".

La A-52 permaneció cortada durante un tramo de la mañana de este domingo y, posteriormente, se cerró la N-120 debido a la proximidad de las llamas a la carretera

Por otro lado, en cuanto al foco registrado ayer en Oímbra (Ourense), este acabó siendo extinguido sobre las 20.45 horas tras arrasar 26,93 hectáreas, de las cuales 0,5 fueron arboladas, el resto, monte raso, según los datos de la Consellería do Medio Rural. Finalmente, el incendio de Castrelo de Miño (Ourense), en la parroquia de Barral, se dio por controlado ayer con un saldo de 200 hectáreas quemadas.

El humo desdibuja la silueta de la ría y llena de olor a quemado Vigo y su área.

El incendio de Arbo, "controlado"

El fuerte viento que comenzó ayer de madrugada en el municipio pontevedrés de Arbo fue el causante de que el incendio forestal iniciado a las 3.17 horas en la parroquia arbense de Mourentán –que va por 400 hectáreas de monte arrasadas– se expandiese a media mañana al lugar de As Searas, próximo a un núcleo de viviendas, lo que motivó que alrededor de las 11.00 h la Xunta solicitase la declaración del nivel 2 de alerta.

El fuego "está controlado" y que se trabaja en la zona para evitar que se reactive algún foco debido al viento y a las altas temperaturas

Poco después, las llamas alcanzaban la parroquia lindante de Arbo, poniendo en jaque al vecindario del barrio de A Rocha. Temerosos de que llegasen a sus casas, los residentes se movilizaron con tractores y cubas de agua que utilizan habitualmente para sulfatar sus viñedos para mantener el fuego a raya, también durante la noche. “Non nos podemos quedar quietos vendo como arde, temos que facer o que poidamos cos nosos medios tamén”, apuntó una lugareña de A Rocha que, junto a sus vecinos, recurrieron a cubos y mangueras para aplacar no solo las llamas amenazantes, sino también sus nervios. Además de otros medios, se llegó incluso a necesitar la actuación de la Unidad Militar de Emergencias (UME).

Fueron precisamente los habitantes de A Rocha quienes vieron más cerca las llamas, llegando incluso el fuego a las puertas de los molinos del Parque Etnográfico Muíños da Rocha. Con todo, únicamente ardió una pequeña barandilla de uno de ellos.

El calor y el fuerte viento dificultan las labores de extinción en Arbo. R. V.

Finalmente, no fue necesario evacuar a ningún vecino, si bien se confinó al núcleo de Vilar durante una madrugada en la que se vivieron "situaciones de tensión", en palabras del alcalde de Arbo, Horacio Gil, quien ha explicado a FARO, diario que pertenece al mismo grupo que este medio, que en estos momentos el fuego "está controlado" -Medio Rural todavía no lo ha confirmado- y que se trabaja en la zona para evitar que se reactive algún foco debido al viento y a las altas temperaturas. La cabeza del incendio se dio por controlada ya ayer a las 17.00 h, sin embargo, precisamente el viento acabó avivando el fuego por los laterales.

Afortunadamente, ha abundado el regidor, "no ha habido daños personales ni ninguna afección material, exceptuando algún viñedo". Gil ha querido agradecer, además, el "esfuerzo" de los equipos de extinción y la predisposición del vecindario para proteger "todos los bienes".

Las imágenes más destacadas del incendio en Arbo. ANXO GUTIÉRREZ

Medio Rural recuerda que la ciudadanía tiene a su disposición el número de teléfono gratuito 085 para denunciar la presencia de un incendio forestal. También ofrecen desde la Xunta el 900 815 085, de carácter anónimo e igualmente sin coste, para denunciar cualquier tipo de indicio sobre una actividad delictuosa con relación a los fuegos en Galicia.

Alerta por temperaturas extremas en Pontevedra y Ourense

En esta jornada dominical, se espera de nuevo que el mercurio llegue a valores extremos en cada uno de los municipios de las provincias de Pontevedra y Ourense, donde la Xunta ha activado el nivel de alerta naranja. Por su parte, el interior de A Coruña y la zona de montaña de Lugo se mantienen en el nivel amarillo. Ambos avisos durarán hasta la próxima semana.

Ourense se sitúa, una jornada más, como el punto más candente de la comunidad gallega, con hasta 40 grados de máxima, según Meteogalicia. Por detrás, Pontevedra, con 37; Vigo, con 34; Santiago, con 31; Lugo, con 29; Ferrol, con 27; y A Coruña, con 26. Las mínimas, por encima de los 16, siendo en la ciudad olívica de 20. Solo se esperan lluvias para el próximo martes y únicamente en la fachada este y sureste de Galicia.