El Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla no va a abrir ningún "expediente" ni informativo "ni de cualquier otro tipo" en relación a las "supuestas irregularidades" y "dudas en la cadena de custodia de los exámenes" relacionadas con las pasadas oposiciones (Oferta Pública de Empleo OPE) de los años 2017, 2018, 2019 y 2020 después de que dos hijos del teniente Antonio Jesús García Sillero -jefe de Seguridad en el centro- que eran eventuales en las categorías de fisioterapeuta y celadores, hayan consolidado su plaza. Así consta en un informe remitido por la Jefatura de Personal del centro a CCOO que había pedido la apertura de una investigación tras la información desvelada la pasada semana por EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, diario que pertenece a este mismo grupo, Prensa Ibérica.

Gestionado por el Ministerio de Defensa, el Hospital Gómez Ulla es uno de los grandes centros sanitarios de Madrid. Está ubicado en Carabanchel, tiene 500 camas, más de 2.000 trabajadores (en torno a un millar fijo y el resto, entre interinos y eventuales, con una tasa de temporalidad que ronda el 40%) y atiende a una población de referencia cercana a las 100.000 personas.

La pasada semana, este diario desvelaba la polémica que se había desatado por las últimas OPE (oferta pública de empleo) del personal civil después de que dos hijos del teniente García Sillero -jefe de Seguridad en el hospital- hayan consolidado su plaza. Ambos familiares eran eventuales en las categorías de fisioterapeuta y celadores, y quedaron en primera y segunda posición en la oposición. Los hijos del teniente -que como se ha dicho ya trabajaban en el hospital con contratos eventuales- han pasado a la fase de concurso en un listado provisional -que en unas semanas será definitivo- de la convocatoria de estabilización de empleo 2017 y 2018, para personal estatutario civil.

En la categoría de 'Fisioterapeuta en la Red Hospitalaria de la Defensa' aparece, en la primera posición, un hijo del militar. En los mismos listados, en la categoría de 'Celador/a en la Red Hospitalaria de la Defensa' figura, con el número 2, su hermana y, en la misma categoría, en el puesto número 7, aparece el yerno del teniente Sillero. Los exámenes, en el caso de los fisioterapeutas, se realizaron el pasado 11 de febrero. En el de los celadores, el 26 de ese mismo mes. Las pruebas tuvieron lugar en la Universidad de Alcalá de Henares.

Un asunto que, también, fue objeto de una pregunta parlamentaria por parte de Izquierda Unida para conocer si se respetó la cadena de custodia de los mencionados exámenes. El Ministerio de Defensa ha defendido que la "oposición ha sido completamente estanca, segura y limpia". En cualquier caso, la publicación de la información ha provocado una enorme inquietud entre los trabajadores del centro. Así, mañana jueves hay convocada una reunión extraordinaria de la Junta de Personal sobre esta cuestión a la que están llamados todos los representantes sindicales.

Apertura de una investigación

Tras conocer la información publicada por este diario, el sindicato CCOO exigía el pasado viernes al Ministerio de Defensa que abriera una investigación ante las "supuestas irregularidades" y "dudas en la cadena de custodia de los exámenes en las que han sido directamente beneficiados con una plaza fija dos hijos y el yerno del teniente y jefe de Seguridad y Destacamento del Hospital de la Defensa Gómez Ulla, Antonio Jesús García Sillero, en las pasadas oposiciones (Oferta Pública de Empleo OPE) de los años 2017, 2018, 2019 y 2020".

El sindicato indicaba que "curiosamente, obtuvieron las mejores calificaciones" y abundaba en que aparecían en el primer y segundo puesto, dentro de la relación de calificaciones de aspirantes, publicada en el Portal de Servicios del Ministerio de Defensa. El pasado 26 de mayo, CCOO, ante "los indicios de dichas irregularidades y la no inhibición en el proceso del citado militar", solicitó información en el órgano de control correspondiente.

"Sin presentar una mínima evidencia"

El sindicato ya ha recibido una respuesta a su petición. La Jefatura de Personal del hospital ha emitido un informe de contestación, al que ha tenido acceso este diario, en el que alude "a las 'presuntas irregularidades' citadas referidas a la persona de un trabajador de este centro que se presentan intencionadamente de forma genérica y sin presentar una mínima evidencia que las justifique resulta particularmente malintencionada ya que es sancionable, incluso penalmente, por parte de la Administración, perjudicando seriamente a dicho trabajador, puesto que se le está imputando hechos que, de ser ciertos, constituirían no solo, una infracción disciplinaria muy grave, sino también un delito".

El mismo documento se refiere a la pregunta parlamentaria, registrada formalmente el 3 de marzo, cuya autora es Roser Maestro, diputada de IU en el grupo de Unidas Podemos. Versaba sobre la cadena de custodia de exámenes del personal civil del Hospital Gómez Ulla. Maestro pedía, además, datos sobre el número de personal civil temporal desglosado por categoría, tipo de contrato y antigüedad. Según fuentes de esta formación política, la semana pasada Defensa no había respondido todavía a las cuestiones planteadas por la diputada.

Sin embargo, en su respuesta a CCOO, la Jefatura de Personal del Gómez Ulla, informa que la pregunta parlamentaria registrada el pasado mes de marzo "fue puntualmente contestada y refutada en el foro adecuado para ello". Se informa al sindicato, asimismo, "que la responsabilidad de todo el proceso selectivo recae en los presidentes y miembros de los tribunales que son soberanos para decidir lo que consideren oportuno con respecto al funcionamiento de los mismos, son por tanto ellos, los que tienen obligación de manifestar cualquier alteración que hayan detectado en la gestión de los procesos selectivos, cosa que hasta la fecha no han hecho".

Una "cadena de custodia irreprochable"

Por otro lado, en alusión a si el teniente García Sillero debía haberse inhibido en relación a la custodia de exámenes, tal y como reclamaba CCOO, se responde que "el citado trabajador no debe inhibirse en ningún caso puesto que no es miembro de ningún tribunal y por tanto difícilmente puede ser determinante en cuanto a nada de lo que en ningún tribunal se decida".

La dirección del hospital militar insiste: "La 'cadena de custodia' ha sido irreprochable. El trabajador citado en su escrito (el teniente García Sillero) se limitó a cumplir la orden de facilitar los medios necesarios para la custodia de los exámenes, inhibiéndose en todo momento hasta la fecha de hoy del procedimiento definido por los presidentes de los tribunales para ello".

Se abunda en el informe en contestación al sindicato que "los exámenes, una vez fotocopiados en el Ministerio de Defensa ante los miembros de cada tribunal, eran introducidos en cajas que se sellaban y cerraba a su vista, trasladándose a una habitación de seguridad de nivel 3, controlándose con cámaras de vigilancia el acceso a la misma durante las 24 horas y registrándose tanto las entradas como las salida (fecha y hora) de los miembros del tribunal (únicos autorizados para ello) que lo solicitasen".

De dicho recinto, prosigue la Jefatura de Personal del hospital, "sólo salían los exámenes en el día de su realización. Una vez realizados los exámenes, que se desprecintaron a la vista de los opositores, fueron recogidas y guardadas las hojas de respuesta en cajas cerradas y precintadas en el momento de la finalización del examen, sólo en estas condiciones –precintadas y selladas- eran introducidas por los miembros del tribunal en la cámara de seguridad hasta el momento de la corrección".

Relaciones personales

Asimismo, indica la Jefatura de Personal que "llama la atención que sólo sean nombrados los familiares del citado trabajador (teniente García Sillero) cuando son muchos los trabajadores de este centro que guardan relaciones personales/profesionales entre ellos sin que por ello se haya puesto en duda su profesionalidad, capacidad de esfuerzo y sacrificio en la obtención de un puesto en la Administración".

Añaden desde la dirección del hospital que también "es llamativo que no se hayan planteado 'dudas', 'rumores' o 'supuestas irregularidades' cuando dichos aspirantes han suspendido procesos selectivos previos". Es por todo ello que, finalmente informan a CCOO "que no se va a abrir ningún 'expediente' ni informativo ni de cualquier otro tipo ya que atender a 'rumores', 'dudas' o 'inquietudes' que no se asientan más que en percepciones particulares de otros trabajadores/elementos externos no parece la línea más adecuada para desarrollar una labor profesional, eficiente y productiva".