A medida que pasan las horas, cada vez más personas del entorno de la vecina de Teis asesinada presuntamente a manos de su pareja el pasado miércoles en Tenerife salen a hablar para honrar su memoria. Algunas de ellas son sus compañeras del Mercado do Berbés, donde trabajó durante más de veinticinco años con un puesto de venta de pescado y marisco. Entre los testimonios recabados, solo ha habido palabras de cariño. En casi tres décadas de historia, en la plaza de abastos del Casco Vello hubo momentos álgidos y otros que no lo fueron tanto: «En las épocas que peor estábamos, que menos gente había, ella era capaz de animarnos a todas. Se ponía a cantar y a bailar y al final conseguía subirnos la moral», apunta una de las pescaderas que todavía no asimila el crimen.
Para quienes la conocieron en su puesto, Clotilde R., de 82 años, era «una persona brillante y una compañera excepcional», recuerda una de las pescantinas más veteranas. Y ese es precisamente el denominador común entre los testimonios de quienes la recuerdan: «Era la alegría del mercado». Su capacidad de esfuerzo y su trabajo duro siempre llamó la atención de todas las compañeras: «En el puesto tenía una obsesión por la limpieza envidiable y además era una de las que más madrugaba, antes de las tres de la mañana ya estaba en la lonja», recuerdan. Y es que ese carácter afable, unido a su trabajo profesional, hacía que tuviese una clientela muy fiel: «De las mejores sin duda, conseguía vender mucho pescado precisamente por lo bien que trataba a la gente y por lo limpio que lo tenía todo» apunta otra que también compartió profesión.
Pero no siempre tuvo puesto. Tuvo que ganárselo desde abajo y trabajar más duro si cabe en los comienzos para lograrlo. Cargaba la mercancía desde la lonja de ribera hasta los furgones que lo llevaban al mercado. Pero cuando pudo ahorrar lo suficiente y se presentó la oportunidad de coger un puesto que quedó libre, no dudó. Desde entonces, se convirtió en una de las caras más reconocidas.
Hoy se prevé que pase a disposición judicial el acusado
En la jornada de hoy está previsto que pase a disposición judicial Ángel Martínez, el hombre acusado del asesinato de su esposa durante la tarde del pasado miércoles en un domicilio del núcleo de Los Cristianos. Agentes de la Policía Nacional trasldarán al ciudadano vigués hasta el Palacio de Justicia de Arona, de forma concreta al Juzgado de Instrucción número 1, que en estos días se encuentra en funciones de Guardia en dicho partido. Ángel, de 83 años, utilizó presuntamente un arma blanca para acabar con la vida de su esposa en un apartamento de la avenida Los Playeros. Y después se provocó unos cortes superficiales, por lo que fue llevado al hospital.
