Medio centenar de trabajadores del Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia (ICHH), amparados bajo el paraguas de Comisiones Obreras (CCOO), se movilizó ayer durante dos horas, en su primera jornada de huelga para exigir que el banco de sangre siga siendo público. Los empleados públicos han tomado la decisión de ejercer su derecho a paralizar su labor después de que la Administración les haya transmitido una propuesta de estabilización como trabajadores de una empresa pública en lugar de funcionarios públicos, lo que a ojos de los manifestantes supone un primer paso para la privatización del banco de sangre autonómico.
Una marea roja y violeta se plantó en el exterior de la sede del ICHH para corear frases como "la sangre no se vende, la sangre se defiende", "trato equitativo para todo el colectivo" o "estabilidad y servicio de calidad" junto el estridente sonido de los pitos y las cacerolas ante la mirada atenta de los viandantes. En las escaleras de la sede medio centenar de personas -prácticamente la mitad del servicio en todo Tenerife- bloqueó durante unas horas el acceso al céntrico edificio santacrucero para exigir un trato igualitario al de otros funcionarios públicos en las próximas oposiciones de estabilización. La primera jornada de huelga fue, a ojos de los trabajadores, un "éxito" ya que contó con el apoyo de la mayoría de la plantilla afectada. "Aquí estamos todos", destacó durante el encuentro el portavoz del Comité de Huelga, Daniel Quintero.
Los trabajadores califican de "éxito" la primera jornada de huelga
Los trabajadores insisten en la imperiosa necesidad de acabar con la alta temporalidad que existe en el banco de sangre. El 80% de los sanitarios del servicio son temporales por lo que la cifra de afectados en ambas provincias asciende a unos 150 trabajadores, afectando al 99% de la plantilla en Tenerife. El personal fijo se cuenta con los dedos: "solo hay 46 en Gran Canaria y uno en Tenerife", relata Quintero. Por esta razón, los trabajadores llevan varios meses advirtiendo a la Administración de la urgencia que existe para estabilizar a todas estas personas que llevan hasta 20 años trabajando concatenando contratos eventuales. Desde que se creó el ICHH (en 1986), los trabajadores tan solo han podido acceder a un proceso de estabilización que se llevó a cabo en 2001.
«Hasta el pasado 29 de abril nos negaban la posibilidad de estabilizarnos, pese a ser trabajadores de la comunidad autónoma», explica Quintero. Ese mismo día, que coincide con el momento en el que los trabajadores presentaron el preaviso de huelga, los representantes del ICHH enviaron un listado a todos los trabajadores proponiéndoles la estabilidad pero no como trabajadores del área de Función Pública - que es lo que cabría esperar de un Organismo autónomo- , sino como empleados del propio Instituto.
Esto ha supuesto un conflicto en los trabajadores, que ven en intento de cambio de nomenclatura de sus puestos laborales un problema más trascendental. "Si nos estabilizamos con entidad pública empresarial, nos regiríamos por el derecho privado", insiste Quintero, que insiste que esto afectaría a sus condiciones laborales y su convenio colectivo. Asimismo insisten que este cambio, a largo plazo, "podría convertir la sangre en un producto de mercado". De consolidarse el cambio que temen los trabajadores, el Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia (ICHH) se transformaría en una entidad pública empresarial (EPE) con menor regulación por parte del Ejecutivo Autonómico y gestionado por un Consejo de Administración.
Los trabajadores temen que la sangre se convierta en un "producto de mercado"
"No lo queremos, queremos seguir siendo organismo público dependiente de la Consejería de Sanidad", denunció Quintero durante la manifestación que se extendió hasta las 12:00 horas a las afueras del banco de sangre. Los trabajadores exigen conocer cuáles son las intenciones reales de la Administración antes del 1 de junio, dado que es el momento en el que deben aprobarse y publicarse en el Boletín Oficial de Canarias los procesos de estabilización que afectan a los trabajadores de la Administración, como refleja la Ley 20/2021 de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público.
La Consejería de Sanidad, sin embargo, ha desmentido la máxima que ha movido esta huelga y es la privatización del servicio. Como explicó la Administración sanitaria a este periódico, los trabajadores serán estabilizados como otros empleados públicos de las Islas.
Los próximos paros de actividad se realizarán los lunes y viernes
Hasta finales de mayo, los trabajadores llevarán a cabo un total de 7 días de huelga. Los próximos paros de actividad se desarrollarán los días 13, 16, 19, 23, 26 y 31 de mayo en horario de 10:00 a 12:00 horas y de 17 a 19 horas. Los trabajadores quieren evitar que sus paros puedan afectar a los llamamientos de sangre, pues son conscientes de lo "importante" que son las donaciones, por esta razón han aceptado unos servicios mínimos "muy por encima" de lo necesario, como relató Quintero. "De las 8 colectas que solemos tener activas se han quedado un mínimo de 6, para garantizar que todo el mundo pueda seguir acudiendo a donar sangre".
