El egresado del Grado de Lengua Española y Literaturas Hispánicas de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) Iván Ramírez Sánchez es el autor del Diccionario de términos de Videojuegos (Verbum, 2021), primera publicación en formato físico centrada en recoger alfabéticamente el léxico del mundo de los videojuegos. 

Portada del Diccionario de términos de los videojuegos | LP/DLP

Portada del Diccionario de términos de los videojuegos | LP/DLP La Provincia

El Diccionario de términos de Videojuegos es un repertorio que recoge el léxico utilizado en el mundo gamer. A través de la observación y el estudio que hacen los medios de comunicación especializados y los propios jugadores, el autor ha recopilado más de 960 términos y expresiones con más de 1.900 sentidos. 

De esta forma, el manual sirve como herramienta de consulta para los aficionados al mundo del videojuego, aquellos interesados en estar al tanto de la jerga y el argot que se maneja en este ámbito y los propios jugadores. También se propone servir de referencia a los profesionales de la comunicación y del mundo del periodismo, de manera que tengan una fuente de resolución de dudas en lo que respecta al significado y a la propia escritura de términos vinculados a este sector. 

Iván Ramírez Sánchez (Las Palmas de Gran Canaria, 1994) es graduado en Lengua Española y Literaturas Hispánicas y Máster de Formación del Profesorado por la ULPGC. Durante los últimos años de su etapa académica, se especializó en la lexicografía. Actualmente, se encuentra realizando el Máster de Lexicografía Hispánica de la Real Academia de Lengua Española. 

Su estudio de la teoría y la elaboración de los diccionarios han marcado su faceta como filólogo, lo cual, unido a su afición por los videojuegos y el trabajo que desempeñó en medios como GTM o Akihabara Blues, le ha llevado a la elaboración de este Diccionario de términos de Videojuegos. Esta obra, a diferencia de otros manuales especializados, no se trata solo de un estudio de una parte del léxico de la lengua española, ajeno a los intereses personales del lexicógrafo, sino que surge de la unión de sus dos pasiones: la elaboración de diccionarios y el mundo del videojuego.