Canarias debe priorizar las políticas que fomenten la educación y la ciencia para que remita la brecha económica y social con Europa y el crecimiento reducido que ha adquirido tras la covid-19. Estos son los pilares que, a ojos de los investigadores de las universidades canarias, pueden permitir mejorar el nivel de vida de los canarios de aquí a diez años.
Es una de las conclusiones del estudio Canarias después del covid-19: escenario pospandémico, encargado por Coalición Canaria a las universidades del Archipiélago. Los investigadores, liderados por el catedrático en economía de la Universidad de La Laguna, Urbano Medina, han realizado una evaluación de la situación de las Islas tras la pandemia para diseñar tres futuros posibles de aquí a 2030 que dependerán de las "decisiones políticas" que se tomen en Canarias en los próximos años.
Uno de ellos, en el que nos encontramos en la actualidad, es el que se ha denominado Canarias en calma. "Este futuro supone seguir igual, con las mismas políticas y ampliando la brecha de Canarias con el resto de Europa", resaltó Medina. Otro posible futuro es el que se ha denominado Canarias con alisios, en el que se llevaría a cabo una política de reformas comedidas que permitiría "cierto desarrollo de las Islas".
No obstante, los investigadores hacen especial hincapié en un escenario en concreto denominado Canarias volcánica. Sin embargo, para que se produzca este futuro, las políticas deben ser mucho más "disruptivas" y orientadas a ensalzar el sistema de I+D, mediante las estrategias orientadas a mejorar el sistema educativo, la innovación y el talento. "En este escenario, por ejemplo, si hay una empresa que va bien pero hay otra más innovadora, la primera debe tender a desaparecer, porque no genera competencia", explicó Medina.
Se deben seguir estrategias orientadas a mejorar el sistema educativo, la innovación y el talento
Esto es lo que se denomina destrucción creativa que es un proceso mediante el cual emergen continuamente nuevas innovaciones, convirtiendo en obsoletas las tecnologías existentes. La destrucción creativa es, según estos investigadores, "la fuerza conductora de la Canarias pospandémica, asegurando su renovación y reproducción permanente, pero al mismo tiempo generando riesgos y turbulencias que deben ser administradas y reguladas".
"Tras la pandemia se debe abrir un periodo de reflexión sobre los cambios que se deben producir en Canarias", insistió Fernando Clavijo, secretario general de Coalición Canaria. Es la segunda vez que esta formación política apuesta por encargar un trabajo de estas características a las universidades. La primera ocasión fue tras la crisis económica de 2008 denominado Estudio Canarias 2020.
"Esto se va a convertir en un documento de difusión para todas las administraciones", aseveró José Miguel Barragán, portavoz del Grupo Parlamentario Nacionalista Canario en el Parlamento de Canarias, quien destacó que esta es la primera parte de un trabajo que Coalición Canaria está realizando para establecer las líneas que defenderá en los próximos comicios. "Estamos de nuevo en una encrucijada que nos obliga a pensar en el futuro, cómo queremos que sea Canarias y a qué retos nos debemos enfrentar para conseguirlo", afirmó Barragán.
Coalición Canaria también ha abierto un proceso de participación con todos los agentes económicos, sociales, sindicales y sanitarios para acotar las políticas por las que el partido debe apostar en los próximos años.
