Hacer un menú semanal antes de ir a comprar y en cada preparación hacer varios platos puede suponer un ahorro en el carro de la compra y en el gasto energético. Ser más eficiente en todos los aspectos cotidianos es objetivo de Cruz Roja, que, a través de proyectos como Alimentación consciente o su área de conocimiento de Medio Ambiente busca que se lleve una alimentación adecuada, saludable, de proximidad y sostenible, y se reduzca la vulnerabilidad de personas que no pueden hacer un uso eficiente de la energía por carecer de dinero para pagar la luz y tener condiciones energéticas confortables. La pandemia ha empeorado la situación y el pasado año aumentó la cifra de familias que tienen dificultades para abonar los recibos de la luz, el agua o el gas.

En el 2021, Cruz Roja atendió a más de 8.800 familias en España con ayuda personalizada sobre eficiencia energética en el hogar, repartió 8.818 kits de microeficiencia, capacitó a 7.545 personas e hizo rehabilitaciones energéticas en 309 hogares. En Canarias, 828 familias recibieron información y asesoramiento sobre ahorro energético, así como dicho kit. De ellas, 26 se beneficiaron de alguna reparación eléctrica y 48 del cambio de un electrodoméstico.

Cruz Roja también impartió talleres para mejorar la gestión de la economía doméstica a 351 familias canarias y ayudó a pagar facturas de agua y luz a otras 659. La ong recuerda que cambiar un cazo convencional por la olla exprés ahorra tiempo y energía, al igual que usar sartenes del mismo tamaño que el fogón o tapas que aprovechen el calor. Descongelar los alimentos en la nevera ahorra energía y es más sano, indica. También se gasta menos si cerramos bien las ventanas o las cambiamos por sistemas con doble cristal. La serie Un paisaje en la cazuela une salud, sostenibilidad y conocimiento en un documental sobre productos de temporada, cocina de aprovechamiento, agricultura y consumo de proximidad, y de evitar el desperdicio. El objetivo es elaborar platos sabrosos, nutritivos, sostenibles y económicos. El programa se puede ver en su web.

El ahorro energético supone una reducción de la factura de la luz. El agua caliente sanitaria supone el 21% del consumo de los hogares. Reducir el mismo, optimizando los suministros, así como el de los electrodomésticos o las luces puede notarse de forma considerable en el recibo: La base del ahorro es un buen aislamiento. Cerrar persianas y cortinas para evitar pérdidas de calor también ayuda. Los sistemas de acumulación son los más recomendables para el suministro de agua caliente y los eléctricos son los menos recomendados para agua o calefacción. Racionalizar el consumo de agua significa también reducir el consumo de energía (cerrar durante el afeitado o cepillado de dientes; tomar una ducha en vez de un baño reduce el consumo hasta en cuatro veces; evitar fugas y goteos supone ahorrar 100 litros de agua al mes; los cabezales de ducha apropiados consumen la mitad. Un buen mantenimiento y sistema de regulación nos ahorra más del 20% del consumo en servicios comunes. Controla, compara y ajusta tu gasto energético periódicamente. Instala sistemas solares que cubran las necesidades energéticas de la casa. Cruz Roja también sugiere utilizar equipos nuevos con etiquetado energético de clase C o D que consuman solo la energía que necesita la vivienda, y mantén tus aparatos en estado óptimo. Utiliza lavavajillas y lavadoras termoeficientes: ahorran energía, dinero y tiempo, señalan desde la ong. Estos objetos, junto a la plancha, son los que tienen mayor potencia unitaria; el microondas y las ollas super rápidas a presión, por el contrario, ahorran energía. También aconseja apagar totalmente televisores y equipos con información en ventanas digitales cuando no los usamos. En los puntos de luz que estén encendidos más de una hora al día, es aconsejable poner lámparas de bajo consumo o tubos fluorescentes; examinar si se puede aprovechar la luz natural, o bien regular el uso con detectores de presencia o temporizadores.

A raíz de la covid-19, Cruz Roja estima que podría empeorar la alimentación, por la pérdida de empleo, el confinamiento o las propias secuelas de la pandemia. La ong dice que planificar la compra y elegir alimentos de calidad, sin que tengan un coste elevado, son retos que afronta en el proyecto de alimentación consciente. A esta selección habría que añadir la buena conservación, evitar el desperdicio, reutilizar los alimentos cocinados y no consumidos, y elegir productos de temporada. Cruz Roja sugiere ir al supermercado siempre con lista de la compra para evitar adquirir lo que no se necesita; no hacer la compra con hambre y así no adquirir por impulso alimentos que no se necesitan y poco saludables; comparar precios de los mismos productos en varios supermercados; elegir las marcas blancas, aprovechar promociones y optar por productos de temporada, sobre todo, frutas y verduras, así como hacerlo en mercados municipales.