Negarse a usar mascarilla o equipo de protección individual (EPI) y cuestionar la validez de los tests de antígenos. Son algunas de las conductas que ha manifestado la coordinadora de enfermería de la residencia de mayores Domingo Sastre, en Lorca. Un comportamiento que la llevó a protagonizar discusiones con sus compañeros de trabajo, manifestaron fuentes cercanas al caso.

La mujer, tras una baja de larga duración, se incorporó esta misma semana a su puesto de trabajo, al frente de las enfermeras de un centro de personas mayores dependiente del Instituto Murciano de Acción Social (IMAS). Cuando regresó, el lunes día 10, fue sometida a un test para ver si estaba contagiada de coronavirus. La prueba dio negativo y la mujer volvió a su puesto.

Sin embargo, la conducta de esta persona puso en alerta al resto de trabajadores de la residencia, en la cual hay personas especialmente vulnerables al virus, debido a su avanzada edad.

Política Social abre una investigación para tratar de esclarecer lo sucedido en el centro Domingo Sastre

Y es que la mujer, apuntan las mismas fuentes, se negaba a acatar todas las normas para prevenir contagios: por ejemplo, no se echaba gel hidroalcohólico, no se ponía la mascarilla ni el EPI y, según fuentes del centro, llegó a malograr numerosos test de antígenos, al no usarlos correctamente.

"Es cierto que el trato con ella es muy difícil en ocasiones. Intentamos entenderla, pero a veces llega al extremo", dijeron a este diario trabajadores del centro, que tiene una treintena de infectados: recientemente fallecía un hombre. "La situación es crítica y efectivamente no estamos acostumbrados a llevar estos equipos tantas horas, pero tenemos que velar no solo por nuestra seguridad, sino por la de los usuarios", apuntaron, sobre los EPI.

Creen que su vuelta laboral durará poco. "Suponemos que será cuestión de días, porque, aunque la ayudemos este no es el mejor lugar en estos momentos para ella. Nos da tristeza e intentamos ayudarla, pero la situación es muy complicada", indican.  

Esta redacción se puso en contacto con la Consejería de Política Social, para preguntar por este caso, y desde este departamento indicaron que se ha abierto una investigación para tratar de esclarecer qué ha sucedido.