A día de hoy es cada vez más evidente que la energía solar fotovoltaica es la apuesta más importante para frenar el cambio climático. Es accesible, inagotable, no emite gases de efecto invernadero y su rentabilidad es cada vez mayor, gracias a la producción masiva y a las nuevas regulaciones que buscan democratizar y extender esta opción energética por todo el planeta.

La intención de reducir los efectos del cambio climático es una tendencia global y está al alcance de todos. Costa Rica, por ejemplo, tiene energía renovable garantizada para los próximos 15 años. La hidroeléctrica, la geotermia y la eólica son las principales energías presentes en la generación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) del país caribeño. Costa Rica apenas depende de recursos fósiles y el autoabastecimiento a partir de fuentes propias, sumado a la diversidad de fuentes de energía y bajos costes de producción, permiten a los costarricenses tener garantizada una producción renovable hasta, como mínimo, 2035.

Australia, por su parte, ha conseguido casi 1 kW de energía solar per cápita tras su apuesta masiva por la instalación de placas solares. En tan solo un año, el país austral ha instalado paneles fotovoltaicos en más de 370.000 hogares y empresas y actualmente más del 31% de los hogares australianos tienen placas solares en su techo.

Medidas para frenar el cambio climático.

Suecia, Dinamarca y Noruega lideran el ranking sobre transición energética global. Este último en concreto es uno de los estados más sostenibles del mundo y exporta grandes cantidades de electricidad a territorios vecinos. Escandinavia cuenta con un exitoso modelo energético propio, basado en las energías limpias, la movilidad eléctrica y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

En Islandia, más del 80% de hogares se abastecen con energía renovable. Las condiciones geológicas de la isla proporcionan una gran cantidad de recursos geotérmicos e hidroeléctricos que permiten a sus habitantes aprovechar estas fuentes renovables propias para satisfacer las necesidades de consumo doméstico. Todo un ejemplo a seguir, el de un país que hasta comienzos de 1970 se abastecía fundamentalmente con combustibles fósiles. Hoy en día, sin embargo, las centrales hidroeléctricas y la geotermia abastecen la mayor parte de la demanda energética de Islandia.

 ¿Sabes que puesto ocupa España en potencia renovable instalada?

Y España, ¿dónde queda en medio de todo esto? ¿Sabías que, a día de hoy, Bruselas, con poco más de 180.000 habitantes, tiene instaladas más placas solares que todo nuestro país?

España se sitúa hoy en el noveno puesto del mundo en potencia renovable instalada, pero lo tenemos todo a favor para seguir subiendo posiciones en la lista. Un clima ideal con más de 1.700 horas de sol al año, terrenos, acceso a la red, tecnología…Y lo que es más importante, la solidaridad y el activismo de la gente.

Placas solares en una vivienda.

Los españoles no nos conformamos con dejar que las cosas las arreglen otros y hay mucho a nivel individual que podemos hacer para mejorar el planeta. Por ejemplo, unirnos a La Revolución de los Tejados e instalar placas solares en nuestro tejado. desde el sofá de nuestra casa.

La lucha contra el cambio climático empieza en tu tejado

Holaluz, como compañía eléctrica ESG número 1 en el mundo, quiere hacer frente al cambio climático apostando por soluciones sostenibles a largo plazo como La Revolución de los Tejados. Es decir, convirtiendo el mayor número de tejados en energía 100% verde para el mayor número de personas en España.

Además, lo puedes hacer sin adelantar ni un solo euro gracias a las subvenciones Next Generation de la Unión Europea y los diferentes cambios legislativos que están aplicando las comunidades autónomas, por lo que convertir tu tejado en un tejado verde es mucho más fácil de lo que quizás habías imaginado. 

Si cambiamos el modelo energético actual hacia un modelo que fomente la generación de energía de origen renovable, dependeremos en menor medida de otras energías y, por lo tanto, más barata y limpia será la que utilicemos. De este modo, y cumpliendo con los Objetivos 7 y 13 de Desarrollo Sostenible marcados por la ONU, será posible garantizar el acceso a una energía asequible, segura y sostenible y adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.

Es increíble lo que se puede conseguir con algo tan sencillo como subir a nuestro tejado y recoger toda esa luz de la que ya disponemos, ¿verdad? Gracias a La Revolución de los Tejados cada día es más fácil sumarse a un nuevo modelo energético que busca que los consumidores sean parte del cambio real hacia una sociedad más sostenible y respetuosa con el entorno.

La Revolución de los Tejados.

Holaluz aspira a transformar en energía limpia los 10 millones de tejados que todavía siguen libres en España y conseguir que la producción de energía renovable en nuestro país alcance el 81%. ¿Cómo? A través de atención personalizada, total flexibilidad y buscando siempre el mayor impacto positivo para el planeta y sus clientes.

Si quieres conocer más sobre cómo unir tu tejado a la Revolución, te invitamos a que visites la página web de Holaluz y conozcas cómo puedes formar parte del cambio con solo una llamada. ¿Te imaginas que colocamos a España en lo más alto de la lista de países que luchan contra el cambio climático?