El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, mostró ayer su compromiso para seguir dotando de todos los medios humanos y económicos que sean precisos para combatir la violencia machista contra mujeres y menores, en su lucha de cada día «por una Canarias más justa e igualitaria».
El jefe del Ejecutivo canario ha defendido, en el acto institucional con motivo del Día internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que el Gobierno regional atenderá la prevención, la sensibilización y la asistencia a las mujeres y menores que padecen malos tratos y sobreviven a ellos cada día.
El feminicidio, la expresión más brutal de las violencias machistas, ha sesgado este año en Canarias la vida de dos mujeres, Josefina y Josefa, y la de dos menores, Anna y Olivia, asesinando en vida también a la madre de estas, Beatriz, ha recordado el presidente, al tiempo que ha indicado que desde que se inició el cómputo oficial de víctimas en 2003 ha habido 98 mujeres y 8 menores asesinados en Canarias en este ámbito.
11.477 llamadas de auxilio
Solo en los primeros nueve meses del año, entre enero y septiembre, las violencias machistas generaron 11.477 llamadas al servicio de atención a mujeres víctimas de violencia de género del 112 y en el segundo trimestre de 2021 se presentaron 2.280 denuncias por este mismo motivo, ha proseguido Torres, para recordar que Canarias es la cuarta comunidad con la tasa más alta de víctimas de violencia de género en España, de casi el 21 por ciento. «Y no son números que se acumulan, son menores y mujeres violentadas, maltratadas, anuladas, perseguidas, asesinadas», ha lamentado el presidente torres.
Además, en la actualidad hay en Canarias 4.449 casos activos en el sistema Viogen, bajo seguimiento policial, de los cuales 56 son niñas de 14 a 17 años amenazadas por sus parejas o exparejas, unos datos que suponen una información imprescindible para conocer la dimensión del problema, ha manifestado.
La violencia de género es un mal social que además ante cualquier tragedia se multiplica, amplifica y empeora, como se comprobó durante el periodo de aislamiento por la crisis sociosanitaria de la covid-19 en 2020 «y como tristemente volvemos a cerciorar observando lo ocurrido recientemente en La Palma, donde las atenciones a mujeres por situaciones de violencia de género casi se han triplicado desde el inicio de la erupción volcánica en septiembre de este año», ha proseguido.
