El rapero mallorquín Josep Miquel Arenas, conocido como Valtònyc, ha ofrecido una entrevista con el digital Vilaweb en el que afirma que "Mallorca se me haría pequeña y en estos momentos tengo muchas ambiciones que allí no serían posibles". Afirma que ahora mismo puede "movilizar a más gente" que en 2018, cuando salió la sentencia del Tribunal Supremo, aunque se muestra tajante: “Tengo que aprovecharlo. A pesar de que yo sea libre, no nos podemos relajar: la libertad de expresión es un derecho que tenemos que recuperar".

Sobre las críticas recibidas durante estos días, Valtònyc declara que "algunas personalidades que dicen ser republicanas e internacionalistas han querido minimizar y ridiculizar aquello que pasó, pero personalmente no me afecta. Sé que son fruto de un cáncer que hay dentro del movimiento, que se llama partidismo. Solo defienden su equipo de fútbol por las declaraciones que he hecho y que han molestado. Y tienen derecho". El cantante celebra que "hemos conseguido que en Bélgica nadie pueda ir a la prisión por aquello que en el estado español ha llevado quince raperos a ser condenados" y añade que podrían haber aprovechado lo sucedido para "desestabilizar algo más España", aunque cree que "no ha interesado".

También se acuerda de Pablo Iglesias Podemos: "Es una vergüenza, porque un rapero de veintisiete años, con sus abogados, ha conseguido de cambiar una ley en un país extranjero y hacer política tangible, mientras ellos no han conseguido tumbar la ley mordaza ni la reforma laboral mientras estaban en el gobierno y prometían asaltar el cielo".

Defiende que no solo no le extraditarán, sino que "me han utilizado para aportar mejoras a su sociedad". Así, su objetivo a partir de ahora es "pasar al ataque y ponerme en sincronía con las entidades y organizaciones del país que quieran añadirse de manera tangible a la defensa de la libertad de expresión".