El juez que desde hace 14 años investiga la desaparición del niño Yeremi Vargas en Vecindario (Gran Canaria) ha determinado ya las primeras indagaciones que realizará tras haber reabierto el caso, entre las que no estará citar en calidad de testigo a Antonio Ojeda, "El Rubio", como pedía la familia, para no comprometer la instrucción.

En un auto difundido este lunes por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, el juez Juan Manuel Hermo recuerda que, aunque a día de hoy "no existe un autor conocido de los hechos investigados", la familia Vargas sigue señalando a El Rubio como principal sospechoso de la desaparición del pequeño en 2007, por lo que ve contraproducente aceptar que preste declaración como testigo.

"En su caso, su declaración habría de ser como investigado y lo habría de ser en el momento en el que existan pruebas o indicios suficientes para dirigir la investigación contra esta persona", argumenta el juez, que recuerda que si llama a Ojeda como testigo, este estaría obligado a decir la verdad, lo que supondría "un riesgo evidente para la actividad instructora" si más adelante hubiera base para imputarlo, por las garantías constitucionales que protegen la presunción de inocencia y el derecho de defensa.

Antonio Ojeda, "El Rubio", estuvo formalmente imputado como presunto autor de la desaparición y posible muerte del niño Yeremi Vargas hasta marzo de 2018, cuando la Audiencia de Las Palmas decidió confirmar el archivo del caso, al compartir las razones por las que el juez Hermo defendía que no había base suficiente para dirigir contra ninguna persona la investigación por esos hechos.

Ahora, el juez ha reabierto las indagaciones al aceptar la propuesta de la familia Vargas-Suárez para que se tengan en cuenta indicios que, a su entender, no se valoraron en su momento y que, bajo su criterio, permitirían volver a investigar a Antonio Ojeda, al que los padres del niño siguen señalando como sospechoso.

"El Rubio" ha cumplido ya la condena que se le impuso por abusos sexuales a un menor en El Doctoral, barrio colindante con Vecindario, en un caso el que la familia Vargas-Suárez -y la Guardia Civil- veían paralelismos con lo que pudo pasarle antes a Yéremi.

Y, durante su estancia en la cárcel, hizo una serie de comentarios sobre el niño de Vecindario a algunos presos que la familia sostiene que son reveladores de que sabe lo que le pudo ocurrirle.

El juez se da ahora seis meses para realizar nuevas indagaciones, empezando por examinar una entrevista que el grupo Atresmedia le hizo a El Rubio en marzo de 2015, cuando no estaba formalmente encausado, y revisar el historial médico de Yéremi Vargas, por si se aprecia algún detalle de utilidad para la investigación.

Asimismo, acepta llamar de nuevo a declarar como testigo a la madre del niño, Ithaisa Suárez, con el propósito de que "amplíe aquello que considere relevante para la causa". El instructor la escuchará con esa finalidad el 5 de noviembre, a las 10.00 horas.