El policía gallego Víctor Bellón, que participó en las operaciones de evacuación del personal español en Afganistán, ha recordado este martes la imagen del operativo en Kabul que se le quedó grabada con más fuerza: la de "un niño que lloraba" porque dejaba a su hermano, ya que "la madre tuvo que elegir entre salvar a un hijo o al otro", según ha relatado este agente este martes en A Coruña.

Visiblemente emocionado, Víctor Bellón ha relatado este martes en A Coruña algunos de los complicados y duros momentos que se sucedieron durante la evacuación de colaboradores afganos del Gobierno español en una intervención ante los medios informativos tras ser recibido por la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas; el inspector jefe coordinador de la octava Unidad de Intervención Policial (UIP) de A Coruña, Felipe Díaz, y el comisario jefe de la Brigada provincial de Seguridad Ciudadana, Miguel Ferrero.

Víctor Bellón (Narón, A Coruña, 1972) trabaja en el Cuerpo Nacional de Policía desde hace 27 años y, en concreto, en las Unidades de Intervención Policial desde hace 23 años. Lo destinaron a Kabul en mayo de 2021 y la llegada de los talibanes a la capital cambió su labor, aunque esta ya era su segunda misión en la ciudad afgana, en la que había estado en 2018.

El agente ha relatado hoy en A Coruña que la imagen que se le quedó grabada con más fuerza fue la del pequeño que lloraba por su hermano, que se quedó con su padre en Afganistán, mientras su madre huyó con él. "Eso fue lo más duro. Como padre, para mí sería imposible elegir", ha subrayado Bellón. No obstante, ha destacado que la experiencia fue "satisfactoria" por "poder ayudar a esa gente". "Es lo que más me llena", ha proseguido.

"De la sensación de peligro me he olvidado ya porque ahí vives como en una burbuja y te dedicas a hacer lo que tienes que hacer", ha indicado. En este sentido, ha admitido que "hubo momentos" en los que temió por su vida, especialmente "en el atentado del último día". "Soy una persona tranquila y a veces tampoco soy consciente de esas cosas. Hago mi trabajo", ha enfatizado el naronés, que además no ha dudado en responder que repetiría si fuera necesario "por ayudar".

Víctor Bellón se trae consigo la experiencia "profesional" y "humanitaria" y se siente "muy orgulloso" porque consiguieron evacuar "a mucha gente". El agente ha rememorado que los últimos días el objetivo era "sobrevivir" al intentar hacer lo mejor posible su trabajo con lo que tenían.

Sobre el futuro de Afganistán, ha lamentado la situación de las personas que se tuvieron que quedar, porque siendo colaboradores de extranjeros "están considerados como traidores" y ha sostenido que las mujeres "son las que más van a padecer", junto con los niños.

En la misión que llevaba a cabo estaba con otros 16 policías españoles que se apoyaban unos a otros. "Un día estaba de bajón uno y otro día, otro. Nos íbamos apoyando mutuamente, porque si decae un compañero influye en los demás. Intentábamos animarnos", ha recordado.

Por su parte, la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, ha trasladado su reconocimiento a la labor realizada por Víctor Bellón en la evacuación del personal español en Afganistán, que consistió en "ayudar a las personas que intentaban escapar" de lo que el agente definió en el encuentro como "un verdadero infierno".

"Las vivencias que nos ha relatado evidencian el sufrimiento de la población afgana y el gran trabajo que han realizado nuestras fuerzas y cuerpos allí desplazados", ha subrayado Rivas, que ha hecho extensivo el agradecimiento a todos los efectivos desplazados en diferentes países.

Actualmente, ha indicado, hay 2.900 policías, guardias civiles y militares desplazados en 16 misiones que se desarrollan en cuatro continentes.

La conselleira de Asuntos Sociales, Fabiola García, ha ofrecido esta mañana todo el apoyo de la Xunta a las entidades sociales que están ayudando a los refugiados afganos en Galicia, como la provisión de recursos básicos, escolarización de menores, acceso a la sanidad o inclusión de programas sociales.