Ya está en España. Pablo Febles, el joven tinerfeño que ha estado confinado en un hotel de Malta durante más de una semana con otros 50 menores españoles por dar positivo en Covid, ya está en España. Lo que iba a ser un viaje para aprender inglés en Malta se terminó convirtiendo en una aventura difícil de olvidar para los estudiantes que fueron confinados en sus habitaciones de hotel en condiciones insalubres y con escasa comida.

Un centenar de chicos españoles partieron a comienzo de este mes hacia Malta, un destino considerado seguro, para aprender inglés. Sin embargo, el pasado día 12 saltaron las alarmas. Los padres recibieron un comunicado en el que se informaba que prácticamente la mitad del grupo de españoles había dado positivo en covid y que, como el resto del grupo había sido contacto estrecho, todos debían hacer cuarentena en el hotel hasta que la situación se resolviera. «La cuarentena en Malta es de 14 días, eso causó algo de revuelto entre las familias, pero lo entendimos», explicaba Marta Carrillo, la madre de Pablo Febles, en la edición del pasado viernes de El Día. Carrillo también precisó que la agencia de idiomas con la que los padres contrataron el viaje a Malta les había informado de que su intención era que los jóvenes que hubieran dado negativo, y entre los que se encontraba el joven tinerfeño, volvieran a España de inmediato.

Mientras ese vuelo se organizaba daba comienzo un confinamiento muy duro para las menores puesto que los protocolos malteses prohíben a los ciudadanos tener cualquier tipo de contacto con personas que han dado positivo en covid por lo que los menores, encerrados en el hotel, vieron cómo sus habitaciones se quedaban sin limpiar día tras día y las raciones de comida son cada vez más escasas. Durante varios días Pablo permaneció en una habitación de unos 15 metros cuadrados junto a otros dos compañeros con los que tenía que compartir baño. Las jornadas entonces se hicieron bastante duras y, tal y como reconoce el joven, «pasábamos casi todo el día en la cama, viendo series o intentado hablar con nuestros padres por teléfono», porque no había espacio para hacer ninguna otra actividad. Precisamente la pasada semana las autoridades maltesas anunciaron que fletarían un avión para que los jóvenes que no tuvieran coronavirus pudieran regresar a sus casas. Para poder irse, tuvieron que realizarse test de antígenos y fue en ese momento cuando Pablo dio positivo, por lo que se quedó en tierra.

Sin embargo, después de varias jornadas de negociaciones, las autoridades maltesas y la Embajada de España fletaron un avión para los menores de edad hasta Madrid. Febles aterrizará en Tenerife en los próximos días.