El Gobierno de Canarias ha ampliado a Tenerife y La Palma la declaración de alerta por calor y altas temperaturas que pueden superar los 38 grados. La Dirección General de Seguridad y Emergencias tomó la medida a partir de las 10:00 horas de ayer y la mantiene durante la jornada de hoy. Siguen en esta situación Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura. La base de la decisión ha sido la información meteorológica disponible en aplicación del Plan Específico de Emergencias de Canarias por Riesgos de Fenómenos Meteorológicos Adversos (Pefma).
La alerta se produce como consecuencia de un episodio de calor con temperaturas máximas medias de 37 grados en Lanzarote, Fuerteventura y La Palma, y de 38 en Gran Canaria y Tenerife, pudiéndose superar localmente este umbral. Esta situación afectará al interior de las Islas, principalmente a la mitad sur de Lanzarote y Fuerteventura, así como a medianías y cumbres orientadas al oeste, sur y sureste de Gran Canaria, Tenerife y La Palma. Las mínimas nocturnas se mantendrán altas en estas zonas de las Islas. El Hierro y La Gomera siguen en prealerta.
Las temperaturas fueron ayer significativamente altas. Llegaron a superar los 38 grados en las Islas centrales y los 34 en amplias zonas de las vertientes oeste, sur y este de las de mayor orografía en medianías y zonas altas.
Mejoría por la tarde
Meteotenerife vaticina en Twitter que, aunque restan todavía horas de altas temperaturas, «durante la segunda parte del lunes (por hoy) comienzan a desaparecer los avisos y con ellos volverán las temperaturas más agradables». Desde la Dirección General de Seguridad y Emergencias se insta a la población a seguir los consejos de autoprotección. En este sentido se advierte de tener mucha precaución con la radiación solar y la posibilidad de fuego en los montes. En este sentido, ayer se produjeron durante la tarde hasta cuatro conatos de diversa consideración en Tenerife y La Palma.
Consejos en casa
La Dirección General de Seguridad y Emergencias recomienda a la población dentro de la vivienda, «protegerse del sol y el calor en los lugares menos expuestos el mayor tiempo posible y en las estancias más frescas de la casa». Durante las horas de sol el consejo es «bajar las persianas de ventanas donde toca», además de «abrir las ventanas de la casa durante la noche para refrescarla». También resulta conveniente «recurrir a algún tipo de climatización como ventiladores o aire acondicionado». Sin aire acondicionado en la vivienda, «debería estar como mínimo dos horas al día en lugares climatizados (centros comerciales, cines, etc.)». En este último caso «debe tener en cuenta que, al entrar o salir de estos lugares, se producen cambios bruscos de temperatura que pueden afectarle».
Y en la calle
En la calle hay varias recomendaciones fundamentales. Entre ellas, «evitar el sol directo; llevar una gorra o sombrero y utilizar ropa ligera (como la de algodón), de colores claros y que no sea ajustada». Otras advertencias. «Procure caminar por la sombra, en la playa estar bajo una sombrilla y descansar en lugares frescos o en espacios cerrados climatizados». Por supuesto, «lleve agua y beba a menudo».Además, «tome comidas ligeras y regulares, bebidas y alimentos ricos en agua y sales minerales, como las frutas y hortalizas, que le ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor». De forma taxativa «no tome bebidas alcohólicas. Evite las comidas muy calientes y de muchas calorías». Si toma medicación, «consulte con su médico si puede influir en la termorregulación, si se ha de ajustar o cambiar». «Nunca deje a niños ni mayores en el interior de un vehículo cerrado», recuerdan, y «evite salir y hacer ejercicios físicos prolongados en las horas centrales del día, cuando hace más calor y reduzca la actividad física en ese intervalo».
