Hasta una docena de municipios de la Isla se encuentran en situación de riesgo alto o muy alto frente a la pandemia, en términos de incidencia acumulada durante los últimos 14 días por cada 100.000 habitantes. Según los datos remitidos ayer por el Servicio Canario de la Salud (SCS), Adeje, El Sauzal, Arona, El Tanque, Tegueste, Candelaria, Arico, San Cristóbal de La Laguna, Granadilla de Abona, San Miguel de Abona, Santa Cruz de Tenerife y Vilaflor de Chasna son los doce municipios en peor situación, siempre en función de las cifras registradas durante las dos últimas semanas.

La incidencia acumulada a 14 días en esta docena de municipios oscila entre los 150,93 nuevos casos por cada 100.000 habitantes en el municipio sureño de Adeje y los 408,16 registrados en Vilaflor, también situado en el sur de la Isla.

En el resto de los casos, esta incidencia presenta las siguientes cifras: 156,6 en el municipio de El Sauzal, en el norte de Tenerife; 166,71 en Arona; 175,32 en El Tanque; 177,2 en Tegueste; 179,69 en Candelaria; 197,26 en Arico; 228,43 en San Cristóbal de La Laguna; 245,94 en Granadilla de Abona; 254,38 en San Miguel de Abona; 262,91 en Santa Cruz de Tenerife y 408,16 en Vilaflor de Chasna. En este último, hay que tener en cuenta la baja densidad demográfica que registra el núcleo situado a mayor altura de España. Todo ello, según se desprende de los datos hechos públicos por el organismo dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, que gestiona Blas Trujillo.

Hay que puntualizar que la situación cambia si se toma como referencia la incidencia de nuevos casos acumulados durante siete días. Tomando esto como valor, se producen entradas y salidas en la lista de los municipios más expuestos al riesgo de los efectos del Covid-19. Se mantienen en esa nómina los municipios de Adeje, Arico, Arona, Granadilla de Abona, San Cristóbal de La Laguna, San Miguel de Abona, Santa Cruz de Tenerife, Tegueste y Vilaflor. A ese grupo se añaden Arafo, Garachico y San Juan de La Rambla. De este modo, la situación durante la última semana ha mejorado en tres de los municipios que tienen una mayor incidencia de casos a 14 días: Candelaria, El Sauzal y El Tanque, sin un solo caso en la última semana. Todos estos datos fueron analizados en la reunión de alcaldes celebrada el pasado jueves en el Teatro Leal, de La Laguna, horas después de que el Gobierno de Canarias determinara el nivel 3 en la Isla. 

Esta nueva situación está vigente desde las 00:00 horas de este sábado, curiosamente el mismo día en el que el Ministerio de Sanidad aplica la no obligatoriedad de utilizar las mascarillas en los espacios públicos: muchos son los alcaldes tinerfeños que han expresado su preocupación por esta medida y recomiendan que se mantenga el uso de esta protección porque la situación epidemiológica no es la mejor en la actualidad.

José Manuel Bermúdez, alcalde de Santa Cruz de Tenerife, manifestó anoche a esta redacción que la situación es «preocupante», pero hace un llamamiento a interpretar los datos «con cautela» debido a la alta movilidad que se registra en el Área Metropolitana. En el caso de la capital de la Isla, explicó que «son miles las personas que vienen a trabajar a diario a este municipio, circunstancia que debe ser tenida en cuenta porque no siempre el contagio se produce en la ciudad, sino en otra zona de Tenerife, toda vez que la incidencia está muy dispersa».

Luis Yeray Gutiérrez, alcalde de La Laguna, también mostró su inquietud ante el hecho «de que hayamos bajado los brazos en un momento en el que muchos creían que habíamos superado la pandemia».

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La tendencia al alza del número de contagios que ha experimentado la isla de Tenerife en el transcurso de las dos últimas semanas es uno de los asuntos que están analizando los expertos, teniendo en cuenta que hay factores que son casi idénticos a los de Gran Canaria: ritmo de vacunación y número de rastreadores, entre otros.

Entre las medidas de urgencia que se han tomado durante las últimas horas en Tenerife figura la apertura de un vacunódromo que se encuentra en el Pabellón Insular Santiago Martín, de La Laguna. La primera intención es mantener los turnos de vacunación durante el mayor número posible de horas, aunque no se ha determinado aún el proceso que se seguirá en la franja nocturna. Estas acciones, de forma preferente la concienciación ciudadana, determinarán la evolución de la estadística vinculada al control de la pandemia causada por el Covid-19.