Los sanitarios isleños tuvieron que votar ayer a sus nuevos representantes sindicales; los que velarán por sus derechos laborales durante los próximos cuatro años. Lo hicieron ayer en las elecciones más variadas que ha visto la sanidad canaria, en la que doce fuerzas sindicales han pedido el voto de 27.000 sanitarios de Tenerife y Gran Canaria. En otras palabras, este año se ha presentado un sindicato por cada 2.250 votantes.
La participación después de mediodía ya había llegado al 50%, una cifra que los propios sindicatos consideraron «alta». Médicos, enfermeros, auxiliares, administrativos y otros profesionales del Servicio Canario de la Salud (SCS) en ambas islas se fueron acercando a lo largo del día de ayer a las urnas, bien cuando tenían un rato libre de su larga jornada laboral o poco antes de entrar, para no perder la oportunidad de alzar la voz después de cinco años con los mismos representantes. Para la votación, los votantes dispusieron de 30 puntos repartidos entre los grandes hospitales, las gerencias y Atención Primaria, para facilitar el derecho al voto de los sanitarios. Una votación que, además, será decisiva, pues los representantes que salgan elegidos serán también los que tengan en su mano la negociación de la reconstrucción de la sanidad tras la Covid-19. Los resultados se harán públicos durante el día de hoy, dado que el recuento de votos se demoró hasta altas horas de la madrugada de ayer.
A estas elecciones se han presentado la Unión General de Trabajadores (UGT), Comisiones Obreras (CCOO), el conjunto de los sindicatos de médicos y enfermería (CemSatse), Intersindical Canaria (IC), la Asociación Sindical Autónoma de Canarias (Asaca), el Sindicato de Empleados Públicos de Canarias (Sepca), la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), el Colectivo de Trabajadores de Sanidad (CTS), el Sindicato de Comisiones Base (Co.bas) y el Sindicato de Técnicos de Enfermería (USAE). Este año, como novedad, dos nuevos sindicatos entraron en la ecuación: el Sindicato Estatal de Técnicos Superiores Sanitarios (SIETeSS) y la Confluencia de Médicos (Semca). Este último sindicato ha sido una de las incorporaciones más esperadas, dado que el colectivo, que surge de una escisión del sindicato de médicos (CESM), ha estado luchando por su parte durante este último año por la estabilización del personal en abuso de temporalidad en Canarias por medio de un concurso oposición restringido, logrando que un gran número de facultativos especialistas de área se unan a la causa.
Durante la campaña algunos sindicatos han denunciado la retirada violenta de propaganda electoral
La campaña electoral ha sido feroz. Algunos sindicatos han llegado a denunciar que se han estado retirando de forma violenta cartelería de algunas de estas organizaciones para poner los de otras. De hecho, la gerencia del Hospital Universitario de Canarias (HUC) tuvo que llamar la atención sobre este comportamiento en un comunicado publicado el pasado 4 de junio. En él se afeaba que, a pesar de haber habilitados sitios concretos en los tablones de anuncios para la publicidad sindical, se estaba detectando la colocación de «propaganda electoral fuera de los espacios habilitados (en zonas comunes, lugares de tránsito, e incluso en lugares donde se presta asistencia a pacientes), lo que incide en el correcto desarrollo de la actividad de este centro, máxime teniendo en cuenta que se trata de un centro hospitalario».
La Oferta Pública de Empleo (OPE) de 2020 ha sido uno de los temas estrella sobre los que ha versado la campaña electoral. La falta de oportunidades desde 2007 para que los sanitarios puedan consolidar sus puestos de trabajo, ha llegado a tal punto, más de diez años después, que la necesidad de exigir la convocatoria de más oposiciones ha eclipsado la mayoría de los programas electorales. No obstante, existen salvedades. La principal diferencia entre unos sindicatos y otros es la forma en la que esos trabajadores deben convertirse en fijos. En este sentido, algunos solicitan la fijeza a través de una oferta restringida para el personal que lleva más tiempo concatenando contratos de interinidad –como Asaca, IC o Semca– y otros abogan porque sea el Gobierno estatal quien establezca una fórmula legal para acabar con esta situación –como CC.OO y UGT– .
Cabe recordar que los servicios jurídicos del Gobierno de Canarias le ha tirado de las orejas por tratar de transformar a fijos a algunos interinos en la Administración pública. En lo que están todos de acuerdo es en que las OPE deben convocarse de inmediato y repetirse anual o bianualmente, dado que muchas categorías llevan desde 2007 sin tener la oportunidad de estabilizar su plaza en el SCS. La pandemia también ha hecho palpable la falta de personal. Y aunque en el último año se ha contratado a 3.800 profesionales, para muchos sindicatos no es suficiente. Por ello solicitan no solo que se conviertan en personal interino, sino también a seguir contratando personal para paliar las deficiencias. Es el caso de CemSatse que reivindica un aumento de los ratios y una reducción de los cupos de médicos y enfermeros, especialmente en la Atención Primaria.
