Algunos de los frentes abiertos entre la Gerencia del Hospital Universitario de Canarias (HUC) y sus trabajadores están encontrando respuesta. Tras denunciar la deficiente situación de la nave industrial en la que se encuentra alojado el servicio de almacén, la directora gerente ha admitido la existencia de esta situación y ha asegurado estar buscando otra nave. “Ya se han efectuado visitas a diferentes naves industriales, siendo prioritario para esta Dirección materializar, a la mayor brevedad posible, el referido traslado, querando así gaarantizada la seguridad y salud de los trabajadores”, asegura la gerente, Mercedes Cueto en una comunicación remitida a UGT.

La gerente recuerda que desde el hospital se ha tratado de subsanar lo máximo posible las deficiencias existentes tanto en los suelos (huecos y socavones), como en las paredes (humedades) y hasta en los techos (recubiertos de uralita”. Pero “si bien no se ha podido reparar todas las deficiencias”, sí que se han tomado algunas medidas para tratar de mejorar la situación. No obstante, como ella misma señala, el propietario de la finca no se ha hecho cargo de las reparaciones necesarias, “a pesar de los requerimientos telefónicos efectuados desde esta Dirección”.

Freno a la huelga

Los fontaneros del Universitario, que se encontraban en pie de guerra, también han llegado esta semana a un acuerdo para frenar por el momento la convocatoria de huelga. En una reunión con la Gerencia, los trabajadores expusieron sus principales problemas en el servicio, en el que destaca la mala organización interna. Para los afectados, el principal problema surge del maltrato del coordinador del servicio a los trabajadores.

La gerencia se comprometió a resolver tanto la denuncia por acoso laboral como la evaluación psicosocial del servicio por parte de Riesgos Laborales en el plazo de un mes. Y mientras, será el Jefe de Sección y no el Coordinador quien continúe planificando el trabajo y dando las órdenes directamente al personal de fontanería.