Pedir un test diagnóstico negativo a los viajeros de la Península ha evitado casi 1.000 brotes en Canarias, como asegura el propio Gobierno autonómico. De ahí, que, 10 días después de que haya decaído la norma anterior, Canarias volverá a implementar este control aeroportuario con el que considera que se minimiza el riesgo de importación de nuevos casos y, por tanto, “de provocar un incremento de la Covid-19” en las Islas, al tiempo que se evita el cierre perimetral que se ha adoptado en otras comunidades autónomas.
De esta manera, Canarias volverá a solicitar a los peninsulares un test diagnóstico de coronavirus negativo al llegar a la comunidad autónoma partir del jueves 15de abril. Diez días después de que la normativa anterior hubiera decaído –el pasado 4 de abril– tras cinco prórrogas sucesivas desde mediados de diciembre. Por lo pronto, la normativa estará vigente hasta el 9 de mayo, cuando el Gobierno estatal tiene previsto finalizar el estado de alarma.
El procedimiento será el mismo que se implementó en diciembre. Los pasajeros –mayores de seis años– que quieran viajar a Canarias tendrán que presentar a su llegada un documento que acredite que se ha realizado una prueba diagnóstica de infección activa negativa –ya sea PCR o test de antígenos– 72 horas antes de su llegada a las Islas. Los interesados, o los propios laboratorios, previa autorización expresa de los interesados, deberán remitir los resultados analíticos al Servicio Canario de la Salud (SCS) a pdiasviajes@gobiernodecanarias.org antes de coger el avión o el barco que les lleve a las Islas. Quienes no se la hayan hecho en origen tendrán la oportunidad de realizarla en destino en las 72 horas posteriores a su llegada, pero mientras tanto deberán guardar cuarentena. Este aislamiento no será aplicabe a trabajadores que ejerzan ocupaciones críticas –como sanitarios–, los trabajadores o proveedores de servicios de transporte y mercancías–, pacientes que viajan por razones médicas, personas que viajen para la asistencia o cuidado de menores o dependientes, representantes públicos, trabajadores que regresen de una campaña en el mar o periodistas en su desplazamiento profesional.
En esta ocasión Sanidad añade una nueva circunstancia que no contemplaba anteriormente. En el caso de que la persona se niegue a realizarse la prueba en origen y en destino, estará obligado a guardar una cuarentena de 14 días, y además se enfrenta a una sanción por parte de las autoridades.
La prueba diagnóstica será gratuita para los residentes en las Islas si acuden a los laboratorios concertados con el SCS, es decir, aquellos pertenecientes a Eurofins Megalab. Asimismo, para los viajeros españoles no residentes en las Islas, se aplicará un descuento a la prueba si la realizan en alguno de estos centros repartidos por toda España.
