Pino Caballero (Las Palmas de Gran Canaria, 1968) es catedrática de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial y coordinadora del grupo CryptULL de Investigación en Criptología. También es una mujer comprometida con el feminismo y experta en ciberseguridad. Por ello expuso esta semana en Las Palmas su ponencia ‘Ciberseguridad y feminismo’, en un seminario dirigido a tratar la cuestión de género desde el activismo digital en Internet. 

¿Qué tienen que ver la ciberseguridad y el feminismo?

Hay varias maneras de ataques machistas utilizando las redes que requieren de acciones ciberfeministas para poder defendernos en relación con el conocimiento de herramientas de seguridad. Hay que controlar el acceso a nuestras redes y maximizar su nivel de privacidad para liberarnos de un 80% de casos de ciberacoso contra mujeres.

¿Qué es el ciberfeminismo?

Utilizar las tecnologías para la lucha feminista. Internet sirve para promocionar las manifestaciones feministas, la lucha contra casos como el de La Manada o el #me too. La parte negativa es que a raíz de Internet han surgido también muchas actividades cibermachistas que requieren de una defensa ciberfeminista. Cada día hay más casos de uso de las tecnologías en contra de las mujeres.

¿Cómo se mitiga el efecto de los bulos, de noticias falsas de contenido engañoso, que buscan dañar el feminismo?

Se debe incrementar la formación de la gente, que se acostumbre a tener un espíritu crítico que le haga reconfirmar y analizar cualquier información que le llegue. Hay que acudir a las fuentes primarias, a medios fiables y descartar los no fiables. No es lo mismo recibir un wasap compartido muchas veces y que te lo creas, que si estuvieras leyendo una publicación en un periódico, que ha sido contrastado y confirmado por periodistas.

¿Entran muchos ciberdelincuentes en las redes para actuar en contra del feminismo?

Los ataques crecen en más de un 30% cada año contra todo tipo de actividades en las redes feministas, algo muy preocupante. Los ciberacosadores, a través de cualquier red social, van a por mujeres en las redes con perfil feminista o que se muestren empoderadas. Las redes están configuradas en base a protocolos de seguridad, de acceso, de cifrado, etc. Es muy importante que, desde el lado científico haya mujeres para diseñar e implementar herramientas de ciberseguridad, pero ahora mismo, entre todos los expertos solo hay un 10% femenino. Por eso falta una perspectiva de género en dicho trabajo.

Las mujeres están siendo víctimas de hostilidades en el escenario digital, lo que se conoce como sexismo digital y desinformación de género, ¿no?

Los casos más leves incluyen que seamos troleadas por las redes, es decir, que nos pongan comentarios despectivos, que nos ha ocurrido a casi todas, hasta casos más graves como el del sexting o que se compartan imágenes multimedia de mujeres para dañar su imagen. En medio encontramos el cibercontrol que se cree inocuo cuando tu pareja te mira el móvil y sabe con quién hablas, pero en realidad, todo eso es ciberacoso y está creciendo. Por ejemplo, hay una amenaza que está llegando a Europa y que ya existe en EE UU, sobre utilizar las casas inteligentes en contra de las mujeres, las que están domotizadas, cuyos administradores son, normalmente los hombres. Cuando se convierten en exparejas, que no aceptan la separación, utilizan las propias casas de ellas para hacerles la vida imposible. En España aún no hay muchas viviendas de este tipo, pero en breve, existirán y tenemos que ser administradoras de nuestros dispositivos para no convertirnos en víctimas.

La ciberviolencia ejercida en contra de la mujer emerge como un problema global…

El caso de stalking en que las exparejas hacen la vida imposible a sus exmujeres porque no aceptan la separación, está definido como delito y en Estados Unidos, ya en las órdenes de alejamiento, se expresa explícitamente que se prohíbe a los hombres acceder a los sistemas domotizados de las casas de sus exparejas para hacerles la vida imposible. El troleo aquí aún no es delito, pero en otros países sí, con penas de varios años de cárcel.

¿Tiene algo que ver con el maltrato psicológico la necesidad de esta ciberseguridad?

Si vives en una casa domotizada en que las luces, los altavoces, la temperatura, las cerraduras y las cámaras son inteligentes y su control lo tiene una expareja con la que no te llevas bien, te pueden dar un maltrato muy grave.

¿Habría que difundir la problemática del ciberacoso como violencia de género?

El stalking es delito desde hace unos 6 años. No se puede compartir información multimedia de exparejas porque te pueden meter en la cárcel. Pero falta mucho camino por andar, no solo en el campo tecnológico sino en la legislación.

¿Existen leyes para esta ciberseguridad feminista?

Según van apareciendo los casos de ciberacoso se van definiendo en el Código Penal. El grooming, el acoso a menores fue de los primeros. Hay unidades ya de policía dedicadas a desmantelar a estos pederastas de Internet.

¿Se debe denunciar en las redes en caso de haber sido agredida?

Es muy importante denunciar cuando se ha sufrido ciberacoso, hacer pública esa denuncia aunque sabemos que, muchas veces, no llega a ninguna parte porque hay que aportar pruebas. Para eso se deben guardar las que sean válidas y presentarlas ante la policía. Es importante también denunciar en las redes porque lo que no se cuenta no existe. Hay que evitar que el atacante se vaya de rositas.

¿Es cierto que cuando se usa un navegador es muy importante configurar bien la seguridad y la privacidad, impidiendo el rastreo, bloqueando sitios sospechosos, que no se almacenen las contraseñas, eliminar las cookies y el historial, etc?

Se deben coger buenos hábitos de ciberseguridad. Entre ellos, todas nuestras redes configurarlas al mayor nivel de privacidad que se pueda y te permita utilizarlas, acostumbrarse a tener una buena política de contraseñas, diferentes entre sí, robustas, que no sepa tu pareja, que actualices con frecuencia por si te han hackeado la cuenta, desactivar las cookies, activar la autenticación de doble factor y la geolocalización solo cuando se necesite. Debemos intentar no ser víctimas de ataques de ingeniería social que te engañan sin usar tu tecnología, por ejemplo, diciendo que hablas con el administrador o con correos o el banco sin ser cierto. No pinches y caigas en la trampa. No se debe caer en esos ataques que son tan habituales y básicos.