En Nueva Zelanda, uno de los pocos países que ha anunciado en varias ocasiones estar libre de Covid-19, la medida estrella que ha posibilitado dicho éxito ha sido el de la 'burbuja social': nos podemos relacionar con otras personas, pero estas no pueden hacerlo con ciudadanos ajenos a este grupo. Así, en caso de que haya un brote dentro de cada burbuja, es más fácil de controlar y es casi imposible que la transmisión se haya dado fuera de ella.

En Catalunya se pretende algo parecido con las nuevas recomendaciones y restricciones de movilidad: las normas, desde hoy y hasta comienzos de Semana Santa, dan un respiro y se permite la movilidad dentro de toda Catalunya. Eso sí, en este caso, se puede viajar, por ejemplo, de Girona a Tarragona, siempre que sean personas de la misma burbuja de convivencia.

Este concepto, según ha definido Protección Civil, es "un grupo de personas que conviven bajo el mismo techo. Puede incluir también personas cuidadoras y/o de soporte para evitar el aislamiento social". Es decir, no es lo mismo que la burbuja ampliada, concepto que se describe como "el grupo acotado, estable y reducido de personas con el que se establecen relaciones familiares, laborales, escolares y recreativas".

Ahora, por lo tanto, si queremos viajar con nuestra pareja, pero no vive con nosotros, no será posible porque no pertenece a una burbuja de convivencia. Sí podremos, eso sí, permanecer dentro de la comarca en todo momento.