Canarias descarta adherirse al cierre perimetral que han pactado todas las comunidades autónomas con el Ministerio de Sanidad. “Con los datos actuales no es previsible que el Gobierno acuerde el cierre perimetral del conjunto del Archipiélago durante la Semana Santa”, señaló el portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, en una rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. Una intervención en la que añadió que, en caso de que llegara a ocurrir una situación que requiriera un cierre, el Gobierno de Canarias mantendría las “excepciones de distintas islas”. Es decir, durante la Semana Santa, Canarias podrá seguir recibiendo turistas, a personas que quieran regresar para ver a sus familias o por razones justificadas. Eso sí, siempre teniendo en cuenta las normas de llegada a las Islas, que incluyen la presentación de una prueba de detección de infección activa (PDIA) negativa, es decir, una PCR o un test de antígenos, realizado en las 72 horas previas. En el caso de los turistas internacionales, también deberán presentarlo en el alojamiento turístico. Y aunque seguirá recibiendo turismo, el Gobierno de Canarias tiene previsto adoptar “restricciones adicionales” a las que se tienen en estos momentos durante esos días de finales de marzo y principios de abril. Julio Pérez no quiso adelantar las medidas, aunque desde el Gobierno barajan que sean similares a las que se impusieron durante los Carnavales.

Preocupación por Tenerife.

La evolución de la pandemia es “favorable” en la mayoría de las Islas, a excepción de dos, y así lo hizo constar ayer el portavoz del Ejecutivo. Por un lado, preocupa la situación de Fuerteventura, donde ha habido un aumento progresivo de nuevos casos que, en el día de ayer se reflejó en un ingreso hospitalario de cinco personas al mismo tiempo y en un aumento de 12 casos. De hecho, esto es lo que ha provocado que pase de nivel 1 a nivel 2 en el semáforo canario de riesgo. Sin embargo, inquieta aún más la situación de Tenerife. “No empeora pero tampoco mejora”, señaló Pérez, que recordó que es una situación que se ha venido advirtiendo desde hace unas semanas. En el día de ayer, con 77 positivos nuevos, Tenerife acumuló 475 casos de coronavirus semanales, el número más alto tras el descenso de Navidad. Este número marca un incremento en los casos semanales del 6,7% que, aun siendo menor que en periodos anteriores, sigue suponiendo un incremento sin pausa.

Mejor situación en el resto.

Y es que no ha sucedido lo mismo con Gran Canaria, donde después de Carnavales los datos marcaban un aumento de casos, que, sin embargo, se han quedado en un pico puntual. Gran Canaria sumó ayer 66 casos nuevos, lo que supone una reducción del 5,4% con respecto a la semana previa. Los casos semanales ascienden a 490, casi 20 menos que en la anterior. Con respecto a las islas no capitalinas, Lanzarote sumó 8 casos y mantiene su descenso, La Palma 5, El Hierro y La Gomera 1.

16 ingresos en un día.

Pero si hay un indicador que muestra el empeoramiento de una situación epidemiológica es la presión asistencial. En el día de ayer, en toda Canarias ingresaron 16 personas en alguno de los hospitales. Solo 7 lo hicieron en Tenerife, que ya acumula 187 pacientes de coronavirus en sus hospitales –un aumento del 33% respecto a las últimas dos semanas–, seis en Gran Canaria –que se mantiene en cifras por debajo de las relativas a hace 15 días– y otros 5 en Fuerteventura, que ya suma 6. En las últimas horas se ha notificado el fallecimiento de una mujer de 79 años en Gran Canaria, vinculada a un brote familiar. Permanecía ingresada, padecía patologías previas y había experimentado un empeoramiento de su estado clínico.