El 24 de diciembre, tres días antes de que Canarias –al igual que el resto del país– comenzara el plan de vacunación contra el coronavirus para inmunizar a su población, las residencias para mayores del Archipiélago sumaban 270 contagios confirmados –187 correspondientes a usuarios del centro y 83 a trabajadores–. Apenas un mes después, tras casi seis semanas de campaña para que ancianos y empleados recibieran las dos dosis del fármaco –en su mayoría el procedente del laboratorio de Pfizer en Puurs (Bélgica)–, la incidencia del covid ha caído de manera abrupta en los geriátricos: este jueves, 4 de febrero, sólo se contabilizaban 13 –ocho residentes y cinco sanitarios–.

“Los datos apuntan que empieza a vislumbrarse el impacto positivo de la vacuna”, admite con moderado optimismo Amós García –jefe de sección de Epidemiología y Prevención del Servicio Canario de la Salud (SCS)–. “Todos los indicativos”, agrega, “señalan que la vacuna está pegando bien. Una buena referencia son los datos de Israel, donde la tasa de descensos de los contagios es clara en un amplio grupo de población. Todo es muy preliminar, en el caso de las residencias de aquí, pero hay un perfil de evidencia. Creo que Cataluña ha publicado algo con una misma tendencia y todos percibimos lo mismo, que la vacuna está pegando bien”.

Las números de las residencias para mayores han funcionado como un termómetro que permite calibrar el paso de la pandemia por el Archipiélago. En verano, tras el impacto de la primera ola, la crisis sanitaria estuvo bajo control en los geriátricos: entre el 6 de junio y el 20 de agosto, el número de casos activos en los centros se mantuvo regular: osciló entre siete, cuatro y tres infectados.

Las primeras señales del tsunami que estaba por venir en invierno aparecieron el 10 se septiembre. Ese día, el informe semanal que realiza el Gobierno de Canarias a las residencias para mayores ya notificaba más de medio centenar de contagios confirmados: 51, 22 de usuarios y 29 de empleados –vector clave en el proceso de infección al tener contacto con el exterior del centro–.

Los casos, a lo largo del otoño, se mantuvieron por encima de la media de verano pero sin alcanzar cifras desorbitadas. El 12 de noviembre, por ejemplo, la cifra se disparó hasta los 67 infectados –como pico más alto de ese intervalo de tiempo–. Hasta ahí, todo fluctuó dentro los parámetros normales de una pandemia.

Santa Rita

El miedo se disparó con el segundo informe de diciembre: el día 10, en un documento marcado por el caos registrado en el Hogar Santa Rita (Tenerife), el número de contagios confirmados llegó hasta 264 –210 usuarios de centros y 54 empleados–. Una semana después, la cifra llegó hasta 283 infectados –207 ancianos y 76 sociosanitarios–. Y en Nochebuena, justo antes de que comenzara la campaña de vacunación, el registró quedó en 270 casos.

Desde entonces, ya con el fármaco de Pfizer en circulación entre los residentes de los geriátricos del Archipiélago, los contagios han descendido de manera paulatina. El último día del año pasado se notificaron 114 casos; el 7 de enero fueron 121; el 14 de enero se contabilizaron 92; el 21 de enero el dato bajó hasta 80; el 28 de enero se apuntaron 39; y el pasado jueves el registro cayó hasta 13.

Desde el verano pasado, en concreto desde el 27 de agosto, los centros para ancianos de las Islas no anotaban una cifra tan baja de contagios confirmados –10 en esa fecha; desde entonces siempre han estado por encima de 22–.

Desde que se administró la primera dosis –el 27 de diciembre del año pasado–, un total de 20.260 personas han recibido en Canarias la pauta de vacunación completa contra la Covid-19 –dos dosis–, lo que representa el 0,94 % de la población, según el último informe del Ministerio de Sanidad, fechado el 4 de febrero. En las últimas seis semanas, el SCS ha administrado 75.334 dosis, un 91,1 % de las 82.730 que ha recibido. De las dosis recibidas por Canarias, 79.530 corresponden a la vacuna de Pfizer y 3.200 a la de Moderna –a partir de este fin de semana está previsto que el laboratorio AstraZeneca haga llegar diales con su producto–.

En el conjunto de España, las personas que han recibido una pauta completa de vacunación son 586.122, aproximadamente el 1,2 % de la población. Las dosis administradas en el conjunto de España son el 84,1 % de las entregadas. Sanidad ha entregado a las comunidades y ciudades autónomas 2.218.755 dosis de ambas vacunas, lo que supone que a Canarias han llegado el 3,7 % del total.