Los grupos de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato en cuarentena por COVID-19 representaban ayer viernes, 15 de enero, el 0,04% según los datos facilitados por los centros educativos a la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias. Es decir, de los 17.000 existentes en centros docentes públicos, concertados y privados de las Islas, un total de 7 se encuentran actualmente en confinamiento porque registran algún positivo entre profesorado y/o alumnado.

Desde el inicio del curso y hasta la finalización del primer trimestre escolar, antes de las vacaciones de Navidad, los porcentajes de grupos aislados en Canarias han oscilado entre el 0,1 y el 0,4%.

En la actualidad, los casos activos entre el personal docente suman 66 de entre más de 32.000 profesoras y profesores, y los de alumnas y alumnos 169 de los más de 335.000 escolarizados en el Archipiélago.

Por otra parte, la Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) pidió ayer el cierre preventivo de los colegios en toda España y la suspensión de las clases como medida preventiva hasta que se reduzca la curva de contagios por coronavirus. En una nota de prensa, este sindicato, el más representativo en las administraciones públicas, reclamó una reunión urgente entre el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas para revisar y actualizar los protocolos en las aulas ante la gravedad de la tercera ola y decidir de manera homogénea el cierre de centros. El sindicato ha argumentado esta petición en los últimos datos facilitados por Sanidad que indican que “la incidencia del virus es el doble que la registrada el pasado 22 de diciembre, cuando se iniciaron las vacaciones de navidad y se acerca a las peores cifras de la pandemia”.

Por esto y junto a la ola de frío que sufre gran parte del país y las dificultades para ventilar los centros, el sindicato ha considerado que es “muy difícil” garantizar unas condiciones seguras para el profesorado y el alumnado. A lo que ha añadido la incertidumbre que genera la propagación de las nuevas cepas detectadas del coronavirus.

En este sentido, la CSIF también ha pedido refuerzos de personal en los centros y medición de condiciones de temperatura, humedad y ventilación en las aulas.