El plan de vacunación prevé la elaboración de un registro en el que quedará constancia de quienes rechacen la vacuna. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, explicó ayer que se trata de un documento que no se hará público. Esa información servirá para hacer estudios de farmacovigilancia. El jefe de Sección de Epidemiología y Prevención del Gobierno de Canarias, Amós García Rojas, detalla que el objetivo es tener una base de datos en la que se certifique que se ha ofrecido a cada ciudadano la posibilidad de vacunarse. “Quien no la quiere aceptar, no puede responsabilizar en el futuro al sistema sanitario de que no se le ha dado acceso al fármaco”, detalla.

Con el entusiasmo por la llegada de la vacuna contra la Covid-19 todavía latente, la aspiración de todas las administraciones es alcanzar la inmunidad de rebaño lo antes posible. En Canarias, según estiman los expertos, el objetivo de vacunar al 70% de la población se alcanzará al final del verano 2021. Amós García Rojas cree que es probable que “a lo largo del verano haya un porcentaje amplísimo de la ciudadanía vacunada y que después del verano se alcance la inmunidad colectiva”.

En esta misma línea, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, se aventuró ayer a afirmar que con el final del verano llegará al ansiado final de la pandemia. Gracias a la aprobación de la vacuna de Moderna, previsiblemente a lo largo del mes de enero, se incrementará el flujo de dosis y se podrá aumentar el ritmo de vacunación.

Cuando el nivel de inmunidad de la población llegue al porcentaje deseado, que en el Archipiélago supone algo más de 1,5 millones de personas vacunadas, la mascarilla empezará a dejar de ser una herramienta de protección fundamental. “Será un proceso lento que irá avanzando en función al porcentaje de cobertura que vayamos consiguiendo y el impacto que ocasionemos en el avance de la pandemia”, detalla prudente García Rojas. Quien reconoce que “algunos elementos que han caracterizado nuestra vida en pandemia deberían conservarse en el futuro”. Entre esas costumbres, el presidente de la Sociedad Española de Vacunología señala el lavado de mano o el uso de la mascarilla cuando una persona esté resfriada o con la gripe para evitar contagiar a las personas con las que se tenga contacto.

Sin embargo, para guardar las mascarillas en cajón no solo hay que tener en cuenta el nivel de vacunación que logre alcanzar España. “Hay que conseguir el mismo perfil de cobertura en el resto de países, especialmente en aquellos con los que tenemos una relación más estrecha y directa”, advierte García Rojas.

Paso a paso

Por ahora, los expertos no pueden garantizar que la vacuna contra la Covid-19 evite la infección por SARS-CoV2. “Eso se sabrá según vayamos vacunando”, explica el epidemiólogo y detalla que si una persona inmunizada está en contacto con el virus no enfermará ya que la vacuna evita la enfermedad grave, pero “no se sabe si se podrá infectar y transmitir el problema a otro”.

Aunque sobre la mesa todavía hay dudas sobre las barreras que puede generar la vacuna, el domingo se inmortalizó una jornada histórica y cargada de emoción. García Rojas reconoce que se sintió “tremendamente feliz por haber vivido un acontecimiento que seguramente marcará el ritmo de la historia de la sanidad de nuestra tierra y de la sanidad global”. Además, el epidemiólogo revela que le costó mucho “mantener el tipo” al ver cómo se ponían las primeras vacunas frente a la Covid-19. “Son muchos meses de dolor y de sufrimiento, de ver como hay gente que pierde su trabajo, eso ocasiona un desgaste al trabajar en primera línea de intervención”, señala el jefe de Epidemiología. Quien señala que se empezó a ver la luz al final del túnel, aunque advierte de que “es un túnel con muchos kilómetros que recorrer”.

España ha confirmado hasta ahora nueve casos de la cepa británica del coronavirus, cuatro en Madrid y cinco en Andalucía, aunque hay más casos que se están investigando. En el Archipiélago de Madeira ya se han registrado 18 positivos con la nueva mutación del virus. Sin embargo, en Canarias aún no se ha diagnosticado ningún caso asociado a la cepa británica, “lo que no significa que no pueda estar circulando”, según García Rojas.

Nuevos envíos de Pfizer

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, avanzó ayer que España recibirá hoy 369.525 dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech en cuatro vuelos que aterrizarán en Canarias, Madrid, Barcelona y Vitoria, desde donde se repartirán a casi un centenar de puntos designados por todas las comunidades, mientras que a las ciudades autónomas y a Baleares correrá a cargo de las Fuerzas Armadas. Así lo explicó en la rueda de prensa posterior al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, en la que aclaró que hasta ahora no consta ningún efecto adverso de las inyecciones que se suministraron el domingo, cuando arrancó la campaña de vacunación con las 9.750 dosis recibidas el sábado. La primera gran entrega del fármaco de Pfizer se esperaba ayer, pero una incidencia logística del proceso de carga y envío relativo al control de temperatura ha impedido que se pudiera materializar, por lo que se ha tenido que retrasar a primera hora de hoy. El suministro, dijo el ministro, “va a quedar ya regularizado” para que cada lunes se puedan ir recibiendo alrededor de 350.000 vacunas hasta alcanzar en las próximas 12 semanas más de 4,3 millones de inyecciones. Illa insistió en que el reparto por comunidades va a ser equitativo y de acuerdo a la población diana que debe ser inmunizada en primer lugar. “Y vamos a seguir haciéndolo así”, resaltó el ministro antes de recordar que España ha adquirido “muchas más dosis –140 millones– de las que va a necesitar durante la campaña de vacunación.