Tenerife mantendrá el toque de queda una semana más. Así lo trasladó ayer el portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, en una rueda de prensa realizada tras el Consejo de Gobierno celebrada en el que afirmó que “los datos de Tenerife son preocupantes” y en el que advirtió que la situación de la Isla está “perjudicando” al resto del Archipiélago, dado que está aumentando la incidencia acumulada del conjunto de Canarias. De hecho, debido al incremento de la incidencia acumulada esta semana (51,8 casos por 100.000 habitantes). “Esto puede poner en riesgo la condición favorable de destino turístico de las Islas”, afirmó el portavoz del Gobierno minutos antes de que Reino Unido decidiera decretar el cierre del corredor turístico seguro con Canarias.

Sin embargo, para poder determinar si las medidas restrictivas tomadas por el Gobierno de Canarias hace una semana están funcionando, es necesario ampliar esta restricción de movilidad nocturna al menos durante siete días más. “Los técnicos de Salud Pública nos han comunicado que es preciso esperar 14 días para conocer si las medidas adoptadas surten efecto”, recalcó Pérez al tiempo que insistió en que la situación que está viviendo la Isla es muy “preocupante”.

Riesgo alto o muy alto. Tenerife, según el último informe de la Consejería de Sanidad, se encuentra actualmente en un nivel de riesgo alto en incidencia acumulada (a 7 y 14 días), en índice de positividad, que ya ha alcanzado el 10,9% –el doble de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud–, y en ocupación de camas de críticos, que alcanza el 17,16%. Se encuadra en el nivel muy alto de riesgo en cuanto a incidencia acumulada en población de más de 65 años (a 14 y 7 días vista), que se sitúa en 243,55 casos por 100.000 habitantes y en 173,5 casos por 100.000 habitantes, respectivamente. En nivel de riesgo medio se encuentra la ocupación de camas de agudos (7,2%) y el porcentaje de casos a los que se les rastrea correctamente se encuentra en un riesgo bajo (7,2%).

209 casos nuevos. En el día de ayer, Canarias registró 209 casos nuevos de coronavirus, pero la mayoría, una vez más, se acumularon en Tenerife. De hecho, la isla sumó ocho de cada diez nuevos casos que se diagnosticaron, hasta un total de 173. Gran Canaria, por su parte, sumó 29 y Fuerteventura cuatro. “Corremos el riesgo de desbordar la isla”, concluyó el portavoz del Gobierno, que además ha llamado a la colaboración ciudadana para extremar el cumplimento de las normas y actuar como policías ciudadanos para advertir a las autoridades en el caso de que se detecte el incumplimiento en otras personas.

Descartado el confinamiento. El portavoz descartó, asimismo, que Canarias vaya a imponer un confinamiento para la población. “No hemos valorado expresamente esa posibilidad, entre otras cosas, por qué no creo que podamos hacerlo sin una medida extraordinaria avalada por el Gobierno central”, afirmó. En este sentido, recalcó que, en caso de que no mejorara la situación en Tenerife, la próxima semana se podrían imponer otras medidas como cierre perimetrales –que admitió que se ha valorado para algunos municipios–, reducir el límite de los grupos sociales por debajo de cuatro o, incluso, eliminar algunas actividades económicas como la restauración o la hostelería. El consejero también afirmó, a la vista de las imágenes que han circulado este puente de centros comerciales y transporte abarrotado, que no consideran que sean centros de contagio. No obstante, admitió que pueden haberse dado “aglomeraciones circunstanciales” que, en todo caso, se han resuelto de inmediato.

Otra residencia. En el día de ayer Sanidad detectó un nuevo brote en la residencia de mayores Cataleya, situada en El Sauzal, que afecta a los 32 residentes y a 11 trabajadores. Los 32 usuarios, todos ellos positivos asintomáticos, continúan residiendo en el centro y son personas de alta vulnerabilidad al ser dependientes para sus actividades diarias además de padecer múltiples patologías de base. El centro será intervenido por el Hospital Universitario de Canarias (HUC), que adoptará las acciones oportunas para la atención sanitaria y cuidados de los residentes, al encontrarse el personal propio del centro cumpliendo los periodos de aislamiento y cuarentena previstos. Se trata de la quinta residencia tinerfeña que ha sufrido un brote de coronavirus durante la segunda ola.

10 ingresos en un día. Tenerife registró ayer 10 nuevos ingresos por coronavirus en los hospitales, todos ellos en planta. Con estas nuevas hospitalizaciones, Tenerife ya cuenta con 238 personas ingresadas, mientras que Gran Canaria tan solo cuenta con 64. El número de ingresos no es baladí, pues es un número muy superior al máximo que soportó Gran Canaria durante su pico de incidencia máximo de la segunda ola (194). La mayor presión asistencial se encuentra en el Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, que atiende a 86 pacientes Covid-19, seguido del Hospital Universitario de Canarias (HUC), que atiende en estos momentos a 81.