El requisito impuesto por el Ministerio de Sanidad para recibir a los viajeros extranjero en España, que obliga a hacerse una PCR 72 horas antes de viajar, se está convirtiendo en el quebradero de cabeza de cientos de canarios que desean regresar a las Islas para pasar las navidades con sus familias. Las eternas listas de espera para los laboratorios privados más económicos y los desorbitados precios de los demás, están empujando a que muchas familias, aún con los billetes comprados, decidan quedarse en tierra, perder el dinero y evadir enfrentarse a la multa que puede acarrear presentarse en el aeropuerto sin la prueba molecular hecha, que asciende a 6.000 euros.

Es el caso de Noemí Hernández que vive en Londres con su marido y su pequeña de dos años. La familia lleva desde marzo sin salir de su casa en Londres, desde la que también trabajan. Con la mejora de la situación en Canarias, decidieron comprar los billetes hace unos meses, a unas 82 libras por cabeza. Pero los precios que los laboratorios privados han impuesto sobre las PCR duplican los de los billetes de avión. “Los precios estándar de la PCR ascienden a 174 euros, si lo multiplicas por tres, es imposible”, explica la afectada. Pero el desorbitado precio de la prueba molecular no es el único impedimento con el que se está encontrando. “Hay pedir cita y no se encuentra a las horas o días que lo necesitas, tampoco hay 100% seguridad de que puedas tener los resultados a tiempo –es decir, 72 horas antes–. “Esta navidad era nuestra recompensa por todo lo que ha pasado”, lamenta Hernández, que cree que va a serles imposible viajar hasta Canarias para ver a sus padres. “Esto es muy triste”, lamenta.

Algunos laboratorios ingleses ofrecen distintas tarifas que aumentan su precio con la celeridad con la que expiden el resultado. El más económico, que garantiza la expedición de resultados en unas 48 horas, cuesta 149 libras. Sin embargo, la brutal demanda que han generado los test a menor precio, también han provocado que, para las fechas señaladas “sea difícil conseguir citas”, como explica el tinerfeño Santiago Díaz, que también se debate entre acudir o no este año a la isla para ver a su familia. Porque no son solo personas que quieren regresar a pasar las navidades con sus familiares, también están “todos los británicos” que quieren viajar a España de vacaciones durante ese mismo periodo. “Sólo hay un par de cadenas de farmacias o laboratorios que ofrece test de PCR en un tiempo prudencial a un precio que, si no puede decirse que sea barato, puede considerarse asumible”, señala Díaz.

Al haber tan solo uno o dos laboratorios, las agendas para hacer PCR en Navidad están completas

Para el escritor Santiago Díaz, las navidades eran “el punto de inflexión”. “Mi familia y yo no hemos salido de Reino Unido en todo el año”, asegura y explica que, tras posponer todos sus viajes durante el año, las señaladas fechas de diciembre iban a ser el momento en el que volvería a casa. “Ahora me encuentro con que debo organizar el viaje de forma que no pasen más de 72 horas desde el momento en el que me hagan el análisis y la llegada a la isla. No es fácil”, explica. Afortunadamente, él aún no ha reservado los billetes, pero hay otros que han decidido perder el dinero del vuelo y quedarse en Reino Unido.

En este sentido también se manifiesta el arquitecto herreño Donacio Cejas, que señala que “el principal reto de la prueba PCR” es que hay que hacérsela 72 horas antes de la hora de llegada a Tenerife que, como señala “es un margen muy estrecho porque no se puede reservar con antelación”. A esto se añade “otra complicación” y es que todas las PCR se deben hacer en horario laboral. En lo que va de año Cejas ha cancelado al menos dos viajes desde Reino Unido, donde lleva ocho años viviendo, hasta Canarias. En los primeros meses de pandemia el mayor riesgo estaba en la posibilidad de quedarse atrapado en las Islas: “era un riesgo cuando empezaron a cancelar vuelos”. “Cuando abrieron el corredor seguro a Canarias, mi pareja y yo nos decidimos a comprar los pasajes a Tenerife”, relata el arquitecto.

Cuanta menos antelación para obtener los resultados, más cara saldrá la PCR. Si se abonan unas 249 libras se obtendrán los resultados al día siguiente, si se paga 349, el viajero los tendrá ese mismo día. “Hay días en los que ni siquiera se podría viajar porque es festivo y los laboratorios no abren”, explica Santiago Díaz. De hecho, desde el día 24 y hasta el 28, prácticamente ningún canario podrá volver a las Islas desde países extranjeros porque les será imposible tener un test realizado con 72 horas de antelación.

Gloria Meneses lleva 15 años viviendo en Reino Unido y tiene su pasaje comprado desde principios de año para el 27 de diciembre. Eso quiere decir que su PCR debería estar hecha como muy pronto el 25 de diciembre, un día festivo. “Veo imposible conseguir hacernos las pruebas”, lamenta aunque, como afirma, la realidad es que “vista la situación de Tenerife, estoy conforme con no ir”. Como explica, normalmente ella, su marido y su niña de cuatro años pasan las navidades en casa de sus padres, lo que en plena pandemia se ha convertido “en otro inconveniente”. La familia pasó el verano en la isla en un apartamento en la playa, pero ahora el contexto es diferente y “más arriesgado”.

Escasez de test

A esto se suma la escasez de test que hay en otros países, como en Portugal. Miguel Coello se encuentra residiendo en Lisboa desde que el gobierno británico abrió las fronteras. “Como trabajo online decidimos venirnos aquí mi mujer y mi hija de 3 años”, explica. Pero ni cambiarse de país ni estar tan cerca de España les permite librarse de la PCR de vuelta. “Como hay falta, tienes que reservar en un laboratorio de análisis clínico y, además, el test no baja de 100 euros”, narra el afectado. El billete a Tenerife, solo de ida, les ha costado 200 euros a la familia. Por tanto, la PCR supondrá que deban abonar prácticamente el doble, todo ello bajo la posibilidad de que la aerolínea con la que viajan cancele los vuelos. No sería la primera vez, pues cuando quisieron viajar a principios de diciembre se lo cancelaron por la poca demanda que había. Hay países, como Francia, que reembolsan el importe de esa prueba privada, pero la mayoría no cubren el coste, que puede superar los 200 euros, como ocurre en Suecia. Mientras, desde el Archipiélago se está ultimando un acuerdo con el Ministerio de Sanidad para que se acepten los test de antígenos a quienes vengan de otros países.