El fomento de la docencia online para poder afrontar a la crisis sanitaria hace aumentar los casos de ciberacoso de estudiantes hacia el profesorado. Es la conclusión a la que llega el Defensor del Profesor en Canarias tras las denuncias recibidas durante el pasado curso 2019/2020. El servicio puesto en marcha por ANPE Canarias hace ya doce cursos experimentó un descenso en el número de docentes atendidos durante el anterior año académico, pasando de 168 a 102, debido sobre todo al confinamiento. De entre todos ellos, 45 profesores denunciaron situaciones de ciberacoso.

El aumento de este tipo de denuncias pone de manifiesto la facilidad que existe en la actualidad para agredir al profesorado a través de las herramientas digitales que se han empleado a lo largo de los últimos meses para garantizar la continuidad pedagógica durante la pandemia. De este modo, ha proliferado la difusión en redes sociales, como Tik Tok, de montajes de vídeo grabados a los docentes mientras impartían clases online y nuevas acciones para boicotear las clases virtuales, como emitir vídeos con el objetivo de interrumpir la enseñanza.

Destaca la difusión en redes sociales de montajes grabados durante las clases telemáticas

En concreto, del total de docentes que presentaron este tipo de denuncias durante el pasado curso, 22 de ellos imparten docencia en la provincia de Santa Cruz de Tenerife y 21 en Las Palmas. El Defensor del Profesor en Santa Cruz de Tenerife, Domingo Rodríguez, destacó ayer durante la presentación de estos datos que “existe gran incertidumbre y miedo por parte de muchos profesores ante los nuevos modelos de enseñanza online implantados durante la crisis sanitaria del coronavirus”. De los 102 casos registrados en total, por etapas educativas, nueve se dieron en Educación Infantil, frente a los 21 del curso anterior; 35 en Primaria frente a 58 en 2018/2019; 45 en Secundaria frente a 60 un año antes; 12 en Formación Profesional Básica frente a 26 en el ejercicio anterior; y tan solo un caso en los ciclos formativos frente a tres el año previo.

El Defensor del Profesor distingue entre tres problemas diferentes: problemas con los alumnos, los padres o los compañeros. Los conflictos con los estudiantes son los más numerosos puesto que se han detectado 66 situaciones de este tipo –frente a las 102 el curso anterior–, mientras que los problemas con los padres ascienden a 32 –frente a 57 en 2018/2019– y los enfrentamientos entre compañeros fueron solo cuatro, ante los nueve del curso anterior.

Normativa necesaria

El Defensor del Profesor destaca la necesidad de disponer de instrucciones actualizadas en materia de protección de datos para salvaguardar la imagen del docente en un momento en el que la docencia online ya es una realidad. En este sentido, el Defensor del Profesor de Las Palmas de Gran Canaria, Bernardo Huerga, indicó que “el e-learning supone un antes y un después en los datos que manejamos y debemos aprender a compatibilizar el derecho a la propia imagen del docente con el derecho a la educación. Eso lo vamos a lograr si disponemos de una legislación adecuada para poder hacer frente a los casos de ciberacoso”.

Además, el presidente de ANPE Canarias, Pedro Crespo, indicó que el Defensor del Profesor ya ha hecho llegar a la Consejería de Educación una solicitud, no solo para que se haga cargo de este servicio esencial para el correcto funcionamiento de la actividad académica, sino además para crear una normativa al respecto. Y es que, “si bien es cierto que el código penal tipifica delitos de acoso en la red, no se puede emplear para este tipo de situaciones en particular”, explicó Crespo, quien añadió que “el plan de digitalización presentado por la Consejería para los próximos cuatro años no incluye nada con respecto a estos casos de acoso en la red”.

En este sentido, Crespo recordó que, en el año 2017, los sindicatos y el Gobierno de Canarias firmaron el Plan de Reconocimiento Social y Profesional del Profesorado que incluía, además del abono de los sexenios, la puesta en marcha de este servicio. La normativa fue negociada durante la legislatura pasada, pero de momento no se ha habilitado esta herramienta. “Ya es hora de que la Consejería de Educación asuma su responsabilidad. No podemos seguir dando respuesta en solitario a este problema”, sentenció Pedro Crespo.

El Defensor del Profesor en Santa Cruz de Tenerife resaltó también la existencia de denuncias infundadas. “Necesitamos que los padres y madres estén del lado del docente y tengan una comunicación fluida para evitar malentendidos porque tanto las familias como los docentes perseguimos el mismo objetivo: formar a personas”. En este sentido, el curso pasado se produjeron once casos en los que se presionó al docente para que mejorara las notas del hijo, una veintena de acusaciones sin fundamento y una única agresión de un padre a un docente. “Falta comunicación entre los padres y el profesorado y nos preocupa porque, antes de denunciar a un profesor, los padres deberían acercarse a él y tratar de solucionar el malentendido y buscar soluciones”, explicó Rodríguez, quien destacó que muchas de estas denuncias son infundadas.