España ha endurecido las restricciones por el Covid-19 y desde ayer entraron en vigor el cierre total de la hostelería en País Vasco, Murcia y 60 municipios gallegos, medidas que se adoptan con un escenario "grave" en Cataluña, según el Govern, y máximos de contagios en Castilla y León y la Comunidad Valenciana. "Extremadamente grave". Así calificó el vicepresidente del Govern en funciones, Pere Aragonès, la situación por el coronavirus en Cataluña, que en las últimas 24 horas notificó 61 muertes y 4.459 nuevos contagios, aunque la velocidad de transmisión del virus está cayendo pero muy lentamente.

No es el caso de Castilla y León, que alcanzó un nuevo récord con 2.237 contagios y 37 fallecidos. En la misma línea se situó la Comunidad Valenciana, que registró la cifra diaria más alta, con 2.327 casos, según de la consellería de Sanidad.

También se dieron cifras muy elevadas en Andalucía, que rozó los 5.000 contagios (4.993 casos) y 55 fallecidos, cinco menos. Aunque en la comunidad andaluza los contagios llevan varios días al alza, el máximo de esta segunda ola se alcanzó el pasado 31 de octubre, cuando hubo 5.622 positivos.

Contención

Para dar un vuelco a la situación y frenar la tendencia, la Junta anunciará hoy más restricciones que afectarán previsiblemente a la restauración, la hostelería y el ocio como un adelanto de la hora de cierre -establecido en las 22.30 horas- o un cierre temporal.

En Cataluña, aunque no se dio una cifra de máximos, Aragonès quiso dejar claro que los números siguen siendo "demasiado altos", por lo que pidió una lucha "constante y permanente" contra el nuevo coronavirus.

Cabe resaltar que las hospitalizaciones han caído pero han aumentado los ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos UCI. Según los últimos datos en Cataluña hay 2.621 ingresados por Covid, de los que 551 están en la UCI, once más que en la víspera.

Mientras en el País Vasco, la tasa de positivos sigue creciendo y en las últimas horas ha alcanzado el 11,45 por ciento, la más alta registrada hasta la fecha. Sin embargo, a pesar de aumentar la tasa de positividad, el número de contagios ha decrecido, con un resultado de 1.445 positivos, 102 menos, un retroceso derivado del menor número de test realizados.

No obstante, en Euskadi han aumentado el número de enfermos ingresados tanto en planta hospitalaria como en cuidados intensivos. Precisamente, para atajar esa transmisión, el País Vasco se estrenó ayer con el cierre total de bares, restaurantes y cafeterías y además ha optado por ampliar en una hora el toque de queda nocturno, que queda fijado entre las 22.00 y las 6.00 horas.

La Xunta de Galicia también se decantó por endurecer las restricciones que estarán activas, al menos, cuatro semanas después de que la incidencia acumulada del virus haya aumentado de forma notable.

Con el propósito de paliar las pérdidas de bares y restaurantes cerrados desde ayer, el Gobierno de Murcia va a destinar 17,3 millones de euros adicionales, en lo que ha denominado el plan más ambicioso y de mayor cuantía de toda España", según palabras de su presidente, Fernando López Miras.