Los estudiantes canarios de 15 años están tan a la cola del país para afrontar conflictos de convivencia y cuestiones globales como en asignaturas como matemáticas, ciencias y comprensión lectora. Es la conclusión del nuevo Informe PISA presentado ayer por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Este nuevo estudio es una ampliación del relacionado con las asignaturas básicas e incorpora las llamadas competencias globales, las habilidades de los estudiantes de 4º de la ESO para analizar, cuestionar y proponer soluciones a retos del siglo XXI como la igualdad de género, la pobreza, el hambre, la guerra, la presión demográfica o el medio ambiente.

Los estudiantes canarios adolescentes figuran en uno y otro estudio en los últimos puestos del ránking nacional. En el presentado ayer los isleños están igualados con 501 puntos con los andaluces. Solo superan a los de Ceuta (438), Melilla (473) y Extremadura (499), y quedan por detrás del resto de alumnos de las comunidades autónomas y de la media nacional (512 puntos). Castilla y León es la que refleja la mejor puntuación en esa capacidad global de sus alumnos, con 534 puntos, seguida de Asturias (527) y Cantabria (526), mientras que las de menor puntuación son Ceuta (438), Melilla (473), Extremadura (499) y Andalucía y Canarias, ambas con 501.

Este informe analiza por primera vez desde que surgieron los informes PISA en el año 2000 la capacidad de los estudiantes para actuar por el bienestar colectivo y que sitúa a España, en general, por encima de la media de la OCDE, ya que el país no suele, en estos análisis educativos, llegar a la media de la OCDE en Matemáticas y Ciencias. Incluso empeoró en 2018 cuando, además, no se le pudo evaluar en lectura por incidencias en las respuestas, según informó ayer la agencia Efe. Sin embargo, en este nuevo estudio, España ha quedado, en general, por encima de la media de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, superando en 13 puntos la media en cuanto a la capacidad para desenvolverse en un mundo interconectado y el 68 % del alumnado español alcanza o supera el nivel básico de rendimiento.

Ramón Aciego, presidente del Consejo Escolar de Canarias, explicó ayer con respecto a los nuevos malos resultados de los estudiantes isleños que "reflejan la misma situación que los de otros informes PISA". "La baja puntuación de la calidad educativa del Archipiélago en general tiene que ver con el contexto de una región con altas tasas de desempleo, bajos salarios y altos índices de pobreza". Según Aciego, para mejorar estos baremos no solo basta con invertir en educación y perfeccionar su gestión: "Sería necesario también una mejora del sistema productivo y de los medios de las familias canarias, así como también de un refuerzo de la Formación Profesional, como se ha hecho en otros países como Alemania".

Los estudiantes españoles han demostrado, eso sí, tener "un interés significativamente mayor en aprender sobre otras culturas y tener respeto por las personas de otras culturas" que la media de la OCDE, aunque expresaron una actitud menos positiva en aspectos relacionados con cuestiones globales. En concreto, España (con un valor positivo de 0,38) es el país en el que el alumnado muestra mayor grado de respeto por las personas de otras culturas, por delante de Canadá (0,30) y Escocia (0,25). En el otro extremo se encuentran Hungría (-0,54) y Bulgaria (-0,51).

España es también el país en el que alumnado acredita una mayor adaptabilidad cognitiva (0,28), definida como la capacidad de amoldar el pensamiento y los comportamientos al entorno cultural predominante o a contextos novedosos. El alumnado con menos adaptabilidad cognitiva se encontraría en Italia (-0,33), Grecia (-0,29) y República Eslovaca (-0,26). España obtiene un rendimiento medio de 512 puntos de capacidad global, trece puntos más que la media OCDE (499), por detrás solo de Canadá (554) y Reino Unido (534).