En medio ambiente, un contaminante es toda aquella sustancia, natural o artificial, que no puede integrarse dentro del ciclo ecológico y biológico natural. Por el contrario, el reciclaje es buscar la reutilización del mayor número posible de sustancias con el objetivo de minimizar al máximo la explotación de los recursos naturales y minimizar la huella de carbono.

Y esos objetivos han sido los que han guiado a ASCASA 2016 a acometer una importante inversión en tecnología respetuosa con el medio ambiente, que ha llevado a la empresa a la instalación en la planta de asfalto de dos componentes de tecnología avanzada, concretamente un secador de árido con anillo reciclado y un desgranador o triturador específico para el tratamiento de asfalto reciclado. Ambos componentes son los primeros instalados en Canarias y con ellos se va a evitar desechar importantes cantidades de asfalto al tiempo que se reduce considerablemente la cantidad de árido necesario.

Planta de asfalto ASCASA 2016

Hasta ahora, cada vez que se acometía la reparación o construcción de una vía, el asfalto antiguo que se retiraba para ser sustituido, debía ser trasladado a una planta de gestión de residuos sin tener prácticamente posibilidad alguna de reutilización; sólo una pequeña parte o porcentaje del asfalto antiguo era reutilizado, ya que se venía reciclando en porcentajes más bajos. Hasta ahora, en el reasfaltado o reparación casi todos los materiales debían ser "nuevos": tanto el asfalto como los áridos, lo cual suponía una mayor explotación de recursos naturales y la acumulación de residuos.

A partir de ahora, la nueva tecnología implementada por ASCASA 2016 permite la reutilización del asfalto reciclado conocido como RAP (Reclaimed Asphalt Pavement) en altas tasas, hasta el 55%, al tiempo que se reduce el impacto ambiental y la huella de CO2 en el proceso de fabricación y se minimiza la explotación de nuevos espacios naturales para la obtención del árido necesario.

Alta durabilidad

La nueva tecnología permite fabricar el asfalto a la temperatura habitual, que oscila entre 140 y 180 grados, sin sobrecalentamientos y con la finalidad de mantenerlo en el estado viscoso adecuado para que sea altamente maleable para el extendido en la obra. La tasa de reciclado puede ser de hasta el 55%, y lo más novedoso es que el RAP se introduce y se precalienta ya en el secador, antes de su incorporación al proceso de fabricación evitando choques térmicos entre el árido virgen y el reciclado, como ocurre con otros sistemas de reciclado. De esta forma, se consigue una alta durabilidad del asfaltado en las vías lo que convierte a ASCASA 2016 en planta de referencia en Canarias, ya que se trata de la primera planta de aglomerado asfáltico que dispone de secador de árido con anillo reciclado y un desgranador específico para el tratamiento de asfalto reciclado.

Secador con anillo de reciclado

La forma de funcionamiento del secador de árido con anillo reciclado (fabricado por MARINI) hace que el asfalto reciclado se introduzca en el interior del secador a través de un tolvín ubicado en la parte superior. Una vez en el interior, y para evitar que entre en contacto con la llama, el asfalto reciclado se desplaza hacia la salida por las paredes interiores en unos cajetines aprovechando el calor que genera el quemador. Toda la tecnología se basa en lograr la mejor calidad del asfalto, de forma que el RAP no tenga nunca contacto con la llama.

Mínimo coste ambiental

A su vez, el desgranador o triturador específico para tratamiento de asfalto reciclado, garantiza que el asfalto viejo retirado de las vías sea procesado y homogenizado, garantizando así que su tamaño sea el adecuado para ser introducido en el secador. Es de fabricación europea (de la marca italiana CAMS) y puede desarrollar una producción de 80 tn/hora, además de contar con complementos que cuidan el medio ambiente y favorecen una mayor calidad del producto como eliminador de polvo, detector de metales, regulador del tamaño del árido en la salida y control de par motor.

Se trata sin duda de una importante inversión tanto desde el punto de vista tecnológico como de respeto al medio ambiente, consiguiendo aunar la necesidad de contar con vías de alta calidad con el mínimo coste ambiental en un territorio cuyo respeto es cosa de todos.