El compromiso del Ministerio de Ciencia e Innovación para rescatar al Instituto Español de Oceanografía (IEO) permitirá a los investigadores disponer de los fondos que no han podido gastar en los últimos diez meses debido al bloqueo burocrático que atraviesa el Instituto a nivel nacional. En los últimos diez meses, los trabajadores del centro tinerfeño han tenido que realizar su labor científica, técnica y asesora sin poder gastar un euro en gastos corrientes.

Es decir, desde octubre del 2019, los trabajadores se han visto sin capacidad para poder adquirir reactivos para investigar, costear los viajes de trabajo o, incluso, sufragar los gastos de agua potable del centro o del aire acondicionado. Esta situación ha derivado en que, por ejemplo, ahora los trabajadores del centro oceanográfico ubicado en Santa Cruz de Tenerife se vean obligados a trabajar con muestras a temperaturas superiores a lo permitido o no puedan acceder a agua potable cuando se encuentran en su puesto de trabajo.

Todo ello a pesar de mantener un flujo de ingresos constante para las arcas del centro a través de la concurrencia de sus investigadores a distintas convocatorias científicas competitivas. Inversiones que, en los últimos años, han caído en saco roto porque eran imposible de gastar. El entramado burocrático en el que se veía inmerso el Instituto Oceanográfico ha impedido durante años a sus investigadores invertir los fondos que conseguían a través de convocatorias competitivas de proyectos científicos de manera directa. Los investigadores han llegado a definir el tedioso proceso como una "lucha para obtener los recursos necesarios". Así, en un informe publicado a principios de julio en el que se explica la situación crítica del organismo, varios científicos resaltan que, una vez se lograban los fondos, en el centro se iniciaba un nuevo proceso interno "de aprobación y evaluación del gasto".

Burocracia enrevesada

Este trámite administrativo contaba con un entramado burocrático tan enrevesado que, además de retrasar el comienzo de los proyectos científicos, impedía poder gastar el dinero, lo que en algunas ocasiones ha llegado a provocar su pérdida. Y todo ello porque el Instituto englobaba todo su presupuesto en una única unidad de gasto, obligando a los investigadores a esperar a que el IEO tuviera "disponibilidad global del crédito" para poder ingresárselo a los proveedores. Una situación que además, se complicaba porque los servicios de gestión y administración se ubican en la sede central del IEO, en Madrid.

Durante una reunión telemática celebrada el pasado 31 de julio entre los trabajadores de los centros oceanográficos y el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, este les aseguró que desde el área que regenta se posibilitará el desbloqueo de los gastos corrientes a través de una transferencia directa. Se trata de una partida total de 4,5 millones de euros que el Ministerio repartirá por los 9 centros oceanográficos ubicados por toda España - en concreto en las ciudades costeras- que servirá como apoyo a la operatividad de la flota de buques oceanográficos, para la gestión náutica del Mitylus o como apoyo a las campañas que el IEO desarrolla en otros buques oceanográficos. De esta manera, los científicos del centro dispondrán finalmente -10 meses después- de esos fondos que han logrado por su excelencia y que, en muchas ocasiones, proceden de Europa.

Esta inyección millonaria en Canarias se derivará a saldar la deuda con los proveedores para garantizar el correcto funcionamiento del centro. Sin embargo, como señalaron algunos investigadores canarios, las vacaciones de verano han provocado que estos compromisos estatales se hayan detenido.

Desbloqueo para comprar boyas

"La caja fija es muy importante, pues permite los gastos del día a día", explicó Pedro Vélez, investigador de la sede tinerfeña del IEO, que destacó que este desbloqueo permite mantener a flote el IEO que lleva sin poder realizar gastos desde noviembre de 2019. Al respecto de la partida de gastos para material inventariable (como boyas, equipos de medición u ordenadores) el Ministerio de Ciencia aseguró en dicha reunión que en breve se desbloquearían también.

El rescate presupuestario del IEO es una de las medidas urgentes que ha tomado en consideración el Ministerio de Ciencia tras decidir integrar el que hasta ahora ha sido un Organismo Público de Investigación (OPI) autónomo en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) bajo la figura de Centro Nacional.

Esta decisión, por otra parte, ha causado revuelo y estupor entre los científicos canarios quienes se han posicionado tanto a favor como en contra la de medida propuesta por el ministro de Ciencia. La integración del IEO en el centro científico más grande del país, según Duque, es fundamental para "cambiar el rumbo y revitalizar la investigación y servicios" de este centro, tal y como señaló en una reciente comunicación que se remitió a todos los trabajadores de la estructura organizativas. "Lo hacemos convencidos de que es la mejor opción para aumentar las capacidades de la investigación española y para mejorar la gestión científica y administrativa de estos tres organismos", insistió el ministro.

Pero esta resolución para el problema que arrastra el IEO desde hace más de una década no siempre estuvo tan clara. El pasado 13 de julio, y en medio de una polémica que estalló a raíz los rumores que aseguraban que la integración del Instituto en el CSIC era inminente, el Ministerio de Ciencia e Innovación lo desmintió. Además, en aquel momento aseguró estar "abierto a cualquier alternativa" que repercutiera en la mejora de la gestión interna del OPI. Apenas dos semanas más tarde, volvía al plan original que tanto revuelo había formado semanas atrás. El nuevo modelo, en todo caso, se demorará hasta el 1 de enero de 2021.