El presidente de ANPE Canarias, Pedro Crespo, ha trasladado este miércoles a la consejera regional de Educación, Manuela de Armas, su malestar por no contar con los sindicatos para la elaboración del protocolo para la vuelta a los centros educativos en septiembre y que atiende a la situación actual del coronavirus, documento que está previsto que el Ejecutivo canario lo presente este jueves.

Por ello, Crespo consideró que el encuentro de hoy "no garantiza la participación de los sindicatos que tienen derecho, según recoge la normativa, a negociar con la Administración todo aquello que afecte a las condiciones laborales del profesorado", y en este sentido inciden en la necesidad de ampliar las plantillas docentes como "medida clave" para la prevención de riesgos laborales de los trabajadores.

El sindicato incide en esta propuesta porque ante la "no" rebaja de los ratios alumno-profesor "el próximo curso escolar pondrá en riesgo a toda la comunidad educativa y, en última instancia, a toda la sociedad", según informó ANPE en un comunicado.

Al respecto, señaló Crespo, en la reunión la consejera informó que se prevé incorporar a 800 docentes más en Infantil y Primaria, así como a 2.500 más en Secundaria y otros cuerpos. De todos modos, ANPE Canarias ha solicitado un análisis que "va más allá de cifras globales" porque entienden que la Administración regional debe "adaptar los números a las necesidades reales de cada centro y etapa educativa para que se garantice que el curso puede desarrollarse de forma presencial y con garantías de seguridad".

El sindicato recordó, además, que en un principio los ministerios de Educación y Sanidad recomendaron grupos burbuja de 15 alumnos y posteriormente lo elevaron a 20 alumnos "y, tras la presión de las comunidades autónomas a 25 y hasta 2º de Primaria". Asimismo, atendiendo a las recomendaciones estatales y a falta del protocolo autonómico para Canarias, se tendrá que mantener la distancia o poner las medidas de protección correspondientes.

Sin embargo, citan las últimas evidencias científicas admitidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que apuntan a que el riesgo de contagio "se incrementa significativamente cuando más personas coinciden en espacios cerrados con escasa ventilación, lo que hace recomendable rebajar al máximo posible la cifra de alumnos en una misma aula".

Aún así, se quejan, el Gobierno canario prevé presentar este jueves un documento elaborado por un comité de expertos que contendrá las "normas básicas" para abrir los centros en septiembre, algo de lo que los sindicatos "no tienen conocimiento de su contenido y esta hoja de ruta tendrá efectos en las condiciones laborales del profesorado", por lo que entienden que "no" es coherente que se les convoque un día antes para hacer aportaciones "cuando ya se cuenta con un plan de vuelta a las aulas".

Crespo sí que afirmó que ante estas quejas, la consejera se disculpó y se comprometió a llevar a mesa sectorial todo lo que afecte a las condiciones laborales del profesorado. También indicó que a través de la creación de diferentes subcomisiones de trabajo se concretarán los diferentes escenarios atendiendo a las etapas educativas y cada tipología de enseñanza.

Finalmente, ANPE Canarias ha incidido en la urgencia de plantear protocolos "claros y concretos" para que el 1 de septiembre el profesorado pueda organizar la práctica docente, especialmente las programaciones, atendiendo a los diferentes escenarios que puedan existir, ya que si bien admite que son "conscientes de que el riesgo cero no existe", sí se debe "hacer todo lo posible para minimizar los rebrotes. Es una cuestión de seguridad y responsabilidad con la comunidad educativa y la sociedad".