Los brotes de coronavirus se siguen agravando en Cataluña, con 928 nuevos casos en las últimas 24 horas y con velocidad de transmisión "muy elevada" en algunas zonas. El área con más casos es la zona metropolitana de Barcelona, con 250 nuevos contagios (tres veces más que la semana pasada), según informó el Departamento regional de Salud. De momento, no se valora confinar la ciudad.

Otros 199 casos corresponden a la provincia de Lleida, en parte de la cual entraron ayer en vigor restricciones de movimiento y comercios para intentar contener la expansión de la enfermedad y donde ayer murió otro paciente. "La velocidad de los contagios es muy elevada", afirmó la responsable de Sanidad en la zona sanitaria de Lleida, Divina Farreny.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, planteó ayer dar "un pequeño paso atrás" para atajar el aumento de positivos en la ciudad y propondrá esta semana medidas para frenar los brotes sin tener que aplicar mayores restricciones, como ya se han aplicado en Lleida o en la vecina ciudad de L'Hospitalet.

La mayoría de los positivos en Barcelona se dan en el Eixample y en el distrito de Sants-Montjuïc, limítrofe con los barrios de La Torrassa, La Florida y Collblanc de L'Hospitalet.

Estos tres barrios, donde Salud ha recomendado no salir de casa si no es para trabajar, comprar u otros asuntos imprescindibles, estrenaron ayer medidas restrictivas decretadas por la Generalitat, como volver a la reducción del aforo al 50% en bares y restaurantes, cerrar teatros, cines y pistas deportivas al aire libre y prohibir visitas a las residencias de mayores.

El juez, sin embargo, no ha permitido que se prohíban reuniones de más de 10 personas, como pretendía la Generalitat, al entender que es una medida "desproporcionada" y se trata de un derecho fundamental, decisión que el presidente catalán, Quim Torra, ha anunciado que recurrirá.

En Cataluña y la vecina región de Aragón los contagios alcanzaron el máximo desde el final del estado de alarma que significó la conclusión del estricto confinamiento de gran parte de la población, informó ayer el Ministerio de Sanidad español. El presidente de una comarca aragonesa pidió ayer la ayuda urgente del Gobierno e incluso del Ejército para cortar un brote que ha causado ya 29 casos en Albalate de Cinca.

Todos los contagiados en ese brote son trabajadores temporales de la agricultura, algo también bastante común en Cataluña y otras zonas agrícolas en época de cosecha, debido a las condiciones en las que residen, amontonados en viviendas o barracones.

Cierre de bares en Baleares

En la turística región de Baleares, las autoridades cerraron varias calles de ocio nocturno después de la indignación causada por las imágenes de jóvenes festejando en grupo sin cumplir ningún tipo de medidas de precaución. "No queremos turistas incívicos en nuestras islas, que no vengan", afirmó el ministro regional de Turismo, Iago Negueruela, al anunciar las medidas. Según las autoridades, la mitad del centenar largo de brotes detectados tiene su origen en reuniones familiares o sociales. En varias de las zonas más afectadas, los ciudadanos se quejan de que la población más joven mantiene prácticas de riesgo y luego los brotes acaban repercutiendo en toda la población.

Un 62% de los españoles cree que habría que adoptar medidas de control y aislamiento más exigentes, según una encuesta divulgada ayer por el Centro de Investigaciones Sociológicas, en la que casi el 97% de los entrevistados afirma sentirse muy o bastante preocupado por los efectos de esta crisis sanitaria.