Las temperaturas se han disparado en los últimos días en Canarias hasta superar ayer la barrera de los 37 grados. Y el sofoco ha llegado para quedarse, al menos en las próximas jornadas. De ahí que la delegación en Canarias de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) haya emitido el aviso amarillo por calor, viento y fuerte oelaje al menos para hoy en la provincia de Santa Cruz de Tenerife y la isla de Gran Canaria, que puede ampliarse al fin de semana. Según las previsiones de la Aemet sobre las temperaturas, hoy volverán a superar los 36 grados, así como las rachas de viento llegarán a los 70 kilómetros por hora y los fenómenos costeros por viento del noreste alcanzarán fuerza 7. Asimismo, habrá calima pero en capas altas, por lo que no será muy perceptible para la población.

El récord lo marcaron ayer los termómetros del municipio grancanario de San Bartolomé de Tirajana, donde llegaron a los 37,4 grados centígrados. Les siguen en las máximas los 35,8 grados de Vallehermoso (La Gomera) y los 35,5 de Tejeda (Gran Canaria). En Tenerife, la máxima se registró en el aeropuerto de Tenerife Sur, con 28,8 grados, seguidos de los 26,5 de Izaña. En cuanto a los vientos, no superaron los 60 kilómetros por hora pero estos registros irán en aumento a lo largo de la jornada de hoy, así como también el calor, especialmente en La Gomera y El Hierro. Las alertas por altas temperaturas, viento y fenómenos costeros son hasta las 23.00 horas de hoy, aunque es probable que se alarguen hasta el domingo.

El calor extremo llega tras una primavera con temperaturas por encima de los registros habituales y muy seca. Así lo refleja el Primer Informe Anual del Estado del Clima en España de la Aemet y dado a conocer ayer. Los datos que aporta este documento son preocupantes y avalan el calentamiento que está sufriendo el planeta. España es en la actualidad 1 grado centígrado más cálida y en torno a un 18% menos lluviosa que en la década de los 60 del siglo pasado, con un año 2019 "muy cálido", -0.8ºC más caluroso de lo normal-, con una temperatura media en el conjunto del país de 15.9ºC. En la presentación del informe, la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, señaló que los datos confirman la tendencia de una España "más cálida y con menor disponibilidad de agua" que hace 50 años.

El segundo año más caluroso

Respecto a las temperaturas, el año pasado fue el segundo más cálido en el planeta y en toda Europa. Tanto el último quinquenio (2015-2019) como el último decenio (2010-2019) han sido los más cálidos en la Tierra desde que hay registros. Desde los 80, cada década es siempre más cálida que la anterior. Ribera subrayó que la precipitación anual sufre un moderado descenso continuado y que si se tiene en cuenta el periodo de los últimos 50 años, esa tendencia se "consolida" en un contexto en el que a consecuencia del mayor calor también se demanda más agua. Así, ante un país de recursos hídricos escasos, la vicepresidenta considera que una mejor gestión del agua es "enormemente importante para las políticas de desarrollo bienestar, gestión y uso responsable de los recursos", al tiempo que insistió en la importancia de actuar en la prevención de desertificación, un riesgo que afecta a dos tercios del país.

El portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, detalló que el aumento de temperatura cada década en España es de 0.3ºC desde los años 60 y que el calentamiento es "más significativo en verano" que en el resto del año y "ligeramente superior" al detectado para el conjunto de los continentes en el periodo 1850-2012. Además, indicó que con una temperatura de 15.9ºC, el año 2019 fue el sexto más cálido en España desde que comenzó la serie en 1965 y que ocho de los diez años más cálidos se han producido en el siglo XXI, por detrás de 2017, 2011, 2015, 2014 y 2006.