Se trata de un trabajo invisible que sabemos que se hace, pero no nos preguntamos cómo. Es aquí donde profesionales de la seguridad sanitaria han tomado las riendas para, a través de la innovación, crear nuevas soluciones que permitan dar esa seguridad. Un asunto que se ha convertido en la obsesión de gobiernos y empresarios para caminar sin sobresaltos hacia la libertad de movimientos.

Una de estas organizaciones, preocupadas por cómo aplicar nuevos productos en el campo de la esterilización, es la empresa canaria Saniper, perteneciente al grupo Tore Jakobson S.A. y que lleva más de 40 años dedicado a prestar servicios de seguridad al sector hotelero. Justamente, esta experiencia y el conocimiento de los protocolos de los alojamientos turísticos, les hizo responder a la demanda de sus clientes, buscando las mejores soluciones en el mercado ante la nueva situación: productos de esterilización que garanticen efectividad en sus tratamientos. Y no van solos en esta aventura. Para probar la eficacia de los mismos cuentan con la ayuda del Dr. Jacob Lorenzo, director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias. Esta institución, dependiente de la Universidad de La Laguna y en la que trabajan investigadores y profesionales acostumbrados a hacerle frente a problemas epidemiológicos, se encuentra actualmente testando la efectividad de la luz ultravioleta y de recubrimientos basados en nano tecnología para eliminar patógenos. Por supuesto, entre estos patógenos, el objetivo está en combatir también a la COVID-19.

Tal y como afirma el responsable de investigación de Saniper, Luis Perdomo, "los primeros resultados nos permiten pensar que la aplicación del recubrimiento de interiores antivírico y antimicrobiano derivado de nanotecnología, podría ser una solución definitiva". En el caso del empleo de la luz ultravioleta, "a diferencia del ozono o la radiación, no es contaminante, no deja residuos y es respetuosa con el medioambiente. Las luces LED ultravioletas permiten desinfectar tanto espacios de gran afluencia de personas como lugares más pequeños, e incluso la ropa, zapatos, utensilios de cocina, de baño, pomos de puerta y botones de ascensor, que son entre muchos otros, elementos que pueden ser portadores de enfermedades en caso de contacto cercano". En este grupo de tecnología LED se incluyen desde pequeños estuches para uso personal y esterilización de gafas, móviles, llaves o carteras, hasta las bolsas de mayor tamaño para utensilios profesionales de médicos, peluqueros o, por ejemplo, cocineros. Asimismo, las varas esterilizadoras eliminan patógenos microscópicos dentro de su campo de acción, utilizando una combinación de radiaciones ultravioleta que resulta letal para la mayoría de los virus y bacterias. En este caso, siendo un sistema de gran eficacia, requiere ser utilizado con precaución y seguir las indicaciones del fabricante.

Todos los productos han sido inspeccionados, verificados, ensayados y considerados aptos por diferentes laboratorios. En palabras de Perdomo, "nos da la tranquilidad de que lo que estamos ofreciendo tiene la garantía de una esterilización efectiva. De hecho, esperamos comunicar en breve las conclusiones de la ULL sobre los efectos de aplicar nuestras soluciones para repeler al COVID-19, e incluso, en el caso del recubrimiento antimicrobiano, con garantía de protección de hasta por dos años".

Según los responsables del producto, "podremos desinfectar espacios públicos, hogares, zonas médicas, colegios... un avance importantísimo que podría ser la mejor noticia para retomar la normalidad sin temor a graves rebrotes en las Islas".