Los profesionales y sindicatos llevan años tratando de sacar adelante una normativa que evite designaciones y sustituciones a dedo como la que se plantea con la destitución de Guillermo Burillo en el Hospital Universitario de Canarias (HUC). La solución que plantean los profesionales es que se elija a los directivos de hospitales de acuerdo a sus méritos, a través de un concurso. De hecho, la Consejería de Sanidad en las Islas estaba a punto de sacar adelante una normativa en este sentido en el Boletín Oficial de Canarias (BOC), pero la promesa, realizada en Mesa Sectorial tan solo una semana antes de las elecciones autonómicas, cayó en saco roto con el cambio de gobierno.

En el acuerdo al que llegaron los sindicatos mayoritarios de la Mesa Sectorial de Sanidad junto al anterior equipo directivo, con José Manuel Baltar como consejero y Conrado Domínguez como director del Servicio Canario de la Salud, el 22 de mayo de 2019 se valoraba que a partir de la siguiente legislatura, los puestos directivos de los hospitales en Canarias tendrán que ser elegidos de acuerdo a sus méritos, es decir, su titulación, su formación y su experiencia. Así lo han acordado los sindicatos mayoritarios de la Mesa Sectorial junto al actual equipo al frente de la Consejería de Sanidad.

De esta manera, por primera vez en las Islas, se designaría a una persona sin injerencia directa política. Con el acuerdo alcanzado, cualquier trabajador que cumpliera los requisitos podrá optar a ostentar este cargo. Esta forma de contratación se encuentra contemplada en la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP), pero que nunca se ha puesto en marcha, al menos en el Archipiélago.

Entre los puestos que se había acordado designar bajo este método se encontraba la dirección y subdirección médica de un centro, la dirección y subdirección de Enfermería, la dirección de Gestión y Servicios Generales. En esta última área también se encuentra la subdirección de recursos humanos, económica y de servicios generales.

Pero nunca se ejecutó. Como señala Francisco Bautista, secretario general de la Federación de Empleados de Servicios Públicos de UGT, "en esa mesa sectorial llegamos a un preacuerdo para que hubiera una concurrenia libre", pero a día de hoy permanece "la dedocracia". Bautista, que en aquel entonces fue uno de los precursores del acuerdo, lamenta que no se haya elevado este acuerdo a Consejo de Gobierno y publicado posteriormente en el BOC. Asimismo se pregunta si "los acuerdos a los que se han llegado con el anterior gobierno no sirven para nada".