La primera semana de la fase 2 de la desescalada ha culminado en Canarias con 26 contagios diagnosticados de coronavirus, cinco menos que en la anterior, lo que supone un 1,1% de los 2.355 positivos registrados desde que comenzó la pandemia. En la fase 1 se sumaron 29 casos en los primeros siete días y 31 en los siguientes. Son cifras que invitan al optimismo, a pesar de que en la última semana una serie de acontecimientos han puesto en alerta a las autoridades sanitarias, como es el caso de varios infectados fruto de una reunión familiar en Tenerife, un entierro multitudinario que se saltó todas las medidas de seguridad en Guía de Isora, o el pasajero positivo de Covid-19 que viajó desde Madrid a Lanzarote a pesar de que debía estar en cuarentena.

El jefe de Epidemiología y Prevención de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, Amós García Rojas, valora de forma positiva la situación actual en las Islas, pero pide al conjunto de la población que no baje la guardia ante una pandemia que continúa siendo una amenaza real. "Se va progresando bastante bien, creo que el esfuerzo tremendo de responsabilidad y solidaridad hacia los más vulnerables que desarrolló nuestra ciudadanía permaneciendo en sus domicilios confinados durante casi dos meses ha sido clave para llegar a la situación en la que estamos. Eso, unido al músculo que ha demostrado el sistema sanitario siendo capaz de dar respuesta rápida a la aparición de casos nuevos y al seguimiento de los contactos, hace que vayamos bien en lo que respecta al objetivo de romper la transmisión del virus, pero ojo, no vamos a acabar con la pandemia, ésta sólo se acaba cuando hay un respuesta global, no podemos bajar la guardia".

Riesgo

García Rojas insistió en que el riesgo de un rebrote sigue existiendo y anima a la población a continuar con el ejercicio de "responsabilidad y solidaridad" durante la crisis sanitaria, a pesar de que las Islas sigan avanzando en la desescalada. "Hay algunas situaciones que nos dejan un poco preocupados, como las imágenes de un entierro en Tenerife. Entendiendo las necesidad de demostrar el afecto, el cariño y el respeto hacia las personas que queremos que han fallecido, no nos podemos olvidar de que no hay que bajar la guardia en ningún momento".

Ante ello, el jefe de Epidemiología del SCS, ha querido transmitir a los ciudadanos el mensaje de que, hoy por hoy, "la mejor manera que tenemos de demostrar nuestro cariño, afecto y respeto hacia las personas que queremos es manteniendo la distancia física, porque así estamos contribuyendo a frenarlos contagios y siendo muy solidarios con las personas más vulnerables al Covid-19".

El epidemiólogo también habló de la figura del "supercontagiador", y que en la pandemia se mide con el número k, otro parámetro similar al R0 -capacidad de propagación del patógeno-, pero que en este caso mide el factor de dispersión en el modelo de transmisión del virus, porque no todos los infectados tienen la misma capacidad para producir una infección efectiva. "El número K hace referencia a personas a partir de las cuales se pueden formar incluso brotes. Son fáciles de identificar porque a partir de un caso índice el número de positivos relacionados con él es importante".

García Rojas puso como ejemplo de contagio masivo un funeral en Vitoria donde un porcentaje altísimo de personas que acudieron resultaron infectadas. "Aquí en Canarias no hemos tenido casos de tanta intensidad", indicó, al tiempo que señaló que la forma de controlar el riesgo de un "supercontagiador" es la misma, que para controlar al resto de la ciudadanía, "haciendo que las recomendaciones sanitarias se cumplan".

En el día de ayer, Canarias registró un sólo positivo de coronavirus, con lo que son 2.335 el número de personas diagnosticadas en las Islas desde que comenzó la pandemia, según los datos facilitados ayer por la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.

Tampoco ayer se registró ninguna muerte por Covid-19 y ya son cuatro días seguidos sin víctimas tras los dos fallecimientos ocurridos en Tenerife el pasado miércoles. Desde que comenzaron las muertes el 13 de marzo, se han producido 160 en las Islas, el 6,7% de todos los positivos diagnosticados. La cuenta de la semana de inicio de la fase 2 de la desescalada y del luto oficial suma tres muertes, tras cerrar las dos anteriores con cuatro y un récord de cinco días consecutivos sin fallecimientos hace dos semanas. Por islas, el número de defunciones durante la pandemia es de 109 en Tenerife, seguido de 39 en Gran Canaria, 6 en La Palma y 6 en Lanzarote. En el resto no ha habido que lamentar víctimas.

También se ha reducido de forma considerable el número de casos activos, bajando del umbral de los 200. Ayer se contabilizaron un total de 197 -el 8,3%-, de los que 163 son tratados en sus domicilios, 28 permanecen hospitalizados en planta, y seis en UCI.