La criminalidad ha descendido en Canarias un 3,5% en el primer trimestre, ya que una gran parte de los delitos que componen las estadísticas de seguridad ciudadana descienden en este periodo, salvo los robos con fuerza en domicilios o establecimientos, que aumentan un 4,1%, así como los homicidios y asesinatos consumados, y los asesinatos en grado de tentativa que crecen un 25 y 57,1%, respectivamente, según el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior.

En concreto, de enero a marzo se han contabilizado en el Archipiélago canario un total de 23.125 hechos registrados por las fuerzas de seguridad, lo que constituye un descenso del 3,5 por ciento con respecto al mismo período del año 2019, cuando se alcanzaron los 23.976 delitos.

Las estadísticas recopiladas por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, policías autonómicas y policías locales indican que entre enero y marzo de este año hubo en Canarias cinco homicidios dolosos y asesinatos, experimentando un aumento del 25 por ciento con respecto al mismo periodo de 2019; mientras que los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa registraron un incremento superior, del 57,1 por ciento, al contabilizar un total de 11.

En cuanto a los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria se produjo un descenso del 19,2 por ciento, al pasar de los 297 en el primer trimestre de 2019 a los 240 de este periodo en el año 2020, sin registrar secuestros en este periodo.

Los delitos contra la libertad e indemnidad sexual pasaron de 228 a 231, lo que supone un ascenso del 1,3 por ciento. En el marco de este mismo capítulo, las agresiones sexuales con penetración crecieron un 237 por ciento, hasta un total de 27, es decir, 19 más que el año anterior. En cuanto al resto de delitos contra la libertad e indemnidad sexual, cayeron un 7,3%, al pasar de 220 a 204.

Respecto a los robos con violencia e intimidación descendieron en Canarias un 7,2 por ciento, cerrando el primer trimestre del año con 374 casos, 29 menos que en el mismo periodo del año anterior. Por contra, los robos con fuerza en domicilios y establecimientos aumentaron un 4,1 por ciento, al pasar de 996 a 1.037.

También las sustracciones de vehículos crecieron en el primer trimestre del año un 2,4 por ciento, al alcanzar los 339 casos, ocho más que hace un año.

Si bien los delitos por tráfico de drogas descendieron un 3,3 por ciento hasta contabilizarse 146, mientras que los hurtos experimentaron una caída del 10 por ciento al pasar de los 7.435 a los 6.694 delitos.