Investigadores japoneses han descubierto "quemaduras solares" en la superficie del asteroide Ryugu que sugieren que antes orbitaba mucho más cerca del Sol y que supondrían las primeras evidencias materiales de este fenómeno. Aunque se sabe que las órbitas de los asteroides pueden cambiar en gran medida, esta es la primera vez que se obtiene evidencia material de esto y estamos asombrados". Efe