El personal sanitario del centro penitenciario Tenerife II ya dispone del equipo necesario para realizar test que permitan determinar si los presos están o han estado contagiados con el coronavirus Covid-19. Dichos profesionales realizarán dicha tarea mediante un dispositivo en el que se aplica una gota de sangre de cada interno y otras dos del mencionado reactivo. En principio, la fiabilidad estimada de este material se sitúa entre un 95 y un 97 por ciento. Los primeros reclusos que se someterán al test son aquellos que hace semanas ya estuvieron en aislamiento en parte del módulo 1.
La máquina detecta dos tipos de anticuerpos. El primero está integrado por los que se forman en primera línea de defensa del cuerpo, que se caracterízan por una creación y una desaparición en un periodo muy reducido de tiempo. El segundo grupo lo forman los anticuerpos de desarrollo más lento, que pueden implantar lo que los médicos y enfermeros llaman "memoria inmune".
Si el reactivo da positivo a los primeros es que la persona tiene la enfermedad desde hace poco tiempo. Si da positivo a los primeros y a los segundos, es que el preso sufre el Covid-19 desde hace ya algún tiempo, pero que es asíntomática. Y si solo da positivo al grupo de los anticuerpos "lentos", es que el interno ha pasado la patología y se le supone inmunizado, tanto si ha tenido síntomas como si no.
Disponer de este elemento de seguridad sanitaria en Tenerife II ha sido posible, según las fuentes, por el esfuerzo infatigable del personal sanitario y también por el apoyo incondicional del equipo directivo de la cárcel.
