El obispo de la Diócesis de Tenerife presidió en la tarde de ayer la eucaristía del Señor de las Tribulaciones en la parroquia de San Francisco de Asís, en la capital chicharrera, donde se venera la imagen milagrosa a la que se atribuye que en 1893 no entrara al barrio de El Toscal el cólera que había contagiado la tripulación del barco Remo, atracado en el puerto de la chía de Santa Cruz de Tenerife.

En su homilía, en la que volvió a dedicar palabras de ánimo tanto para los enfermos por la pandemia como por los que están luchando contra la pandemia y los mayores, monseñor Álvarez aseguró que "en África mueren más personas de hambre que en Europa de coronavirus aunque eso no lo digan los medios de comunicación". Ante los momentos de la tribulación, el prelado dijo que "no vale la competencia ni los intereses, sino un abrazo de Dios para los demás... No nos olvidemos de la enfermedad del alma", advirtió, para insistir en que detrás de la ciencia y los adelantos técnicos está la mano de Dios.

Invitó a la reflexión: cómo un bichito que no vemos es capaz de parar el mundo, e insistió en luchar contra las desigualdades.

E Internet, la nueva calle Oriente. La misa del Señor de las Tribulaciones fue retransmitida finalmente por el facebook de Nivariense Digital, una capilla de la parroquia digital obispadodetenerife.es. Y a su término, los vecinos de la Asociación Luz y Vida y el centro juvenil Encuentro, con la labor encomiable de Alejandro Lorenzo, elaboraron un mosaico de devotos que desde ayer procesiona por las redes sociales, la nueva calle Oriente de El Toscal. Desde este colectivo se mantiene el objetivo de que cuando finalice el confinamiento se pueda celebrar la tradicional procesión en agradecimiento de la protección del Señor de Santa Cruz.