Cada día a las siete de la tarde resuenan en todos los rincones de Canarias, como en el resto del país, los aplausos con los que los ciudadanos reconocen la tarea incansable de los verdaderos héroes de la emergencia sanitaria declarada por la pandemia de Covid-19. Ellos probablemente no puedan escucharlos: están trabajando o intentando descansar tras jornadas extenuantes y a veces desalentadoras. Pero son conscientes de que su labor es más valorada que nunca. En estas páginas, relatan su experiencia en estos días en los que la figura de los hombres y mujeres que ejercen la medicina, la enfermería o la farmacia, que trabajan como celadores, que limpian los hospitales y centros de salud o que conducen ambulancias -entre otros cometidos- ha adquirido dimensiones épicas.

1. Silvia Roldán (enfermera Urgencias La Candelaria).

Silvia considera que el apoyo moral es muy importante y califica la respuesta de la población, y no solo a través de los aplausos desde balcones y ventanas, de "muy emocionante". Cada vez que llegan las siete de la tarde no puedo evitar llorar. Lo agradezco profundamente". La enfermera valora que "la gente está cumpliendo" y destaca que "se acabó el mal uso de las urgencias sanitarias salvo excepciones". Tiene sus momentos de bajón, "sobre todo porque mi madre está en un centro geriátrico y me preocupa que el virus pueda entrar ahí". Acaba con un mensaje: "Quédense en casa para no contagiarnos a nosotros. Lo vamos a conseguir unidos".

2. David Pérez (enfemero CAE Norte).

Este enfermero entiende "positivo y nos da fuerzas para continuar" el apoyo popular. Además, asegura que "da la impresión de que la gente se está dando cuenta de lo que funciona, de verdad, en la sanidad". Reconoce que "parece que la población está más concienciada aunque todavía hay trabajo que hacer en ese sentido". Concluye: "Poco a poco vamos superando la situación y entre todos saldremos adelante. Seguro".

3. Yanira Martín (enfermera Urgencias Ofra).

Se siente "apoyada" por los ciudadanos y da las gracias "por recibir esos aplausos que son un aliento para seguir luchando". Observa que a medida que pasan los días la población es más responsable y más consciente de la necesidad de quedarse en casa para poder salir de esta situación. "Unidos y llevando a cabo todas las medidas saldremos de esta más humanos y valorando los pequeños detalles", finaliza.

4. Aarón Cabrera (enfermero Hospital La Palma).

El enfermero Aarón afronta su trabajo "día a día, con mucha ilusión por hacer las cosas lo mejor posible", aunque no niega que se cuestiona antes de empezar cada turno sobre qué se va a encontrar, cómo están los pacientes o si habrá material suficiente para trabajar. Aun así, reconoce que "pesan mucho más las ganas que el miedo". Son días, dice, en los que notan "el apoyo de la familia, de los amigos, el de los balcones... absolutamente todos". Les llega "para recargar las pilas y hacerte ver que estás desarrollando una de las profesiones más bonitas que hay". El apoyo de los compañeros y compañeras "también es fundamental". "Todos están haciendo una labor absolutamente impresionante".

5. Yaiza Álvarez (enfermera de Urgencias del HUC).

Ya las Urgencias no se colapsan por patologías leves. La situación ha cambiado tanto en tan solo dos semanas. Los ciudadanos han dejado de acudir masivamente a las Urgencias hospitalarias porque entienden que ahora todos deben estar volcados en el Covid-19. Para la enfermera el servicio está "cada vez está más organizado" gracias a los protocolos y ellos están felices de que la responsabilidad de la sociedad les permita centrarse en las urgencias respiratorias. "Me emociona mucho cuando escuchamos los aplausos", explica. Pero no es lo único, en estas últimas jornadas tanto ella como su equipo han agradecido todas las iniciativas ciudadanas que han surgido, además de todo lo que están haciendo por ellos, llevándoles material de protección casero y hasta pizzas para que puedan recuperar fuerzas. "Tenemos que ser un equipo", dice.

6. José Luis Trujillo (jefe de Neumología de La Candelaria).

"Nuestro trabajo es el que hemos elegido, pero que lo reconozcan así emociona y te sientes cercano a la gente. Reconforta y te ayuda a seguir adelante". La primera reflexión de este neumólogo resume su sentimiento. Cuando habla con sus pacientes por teléfono y le dan las gracias es él quien agradece "que cumplan y se queden en su casa si nos quieren ayudar para evitar el riesgo de contagio a los profesionales". Cree que "de esta vamos a salir con la entrega de todos los trabajadores, no sólo sanitarios, y con la unión de toda la población".

7. Raquel de la Fuente (enfermera de Urgencias del HUC).

"Las iniciativas ciudadanas han logrado dejarnos sin palabras", valora esta joven profesional. "Nos han arrancado sonrisas y lágrimas". Es "muy emocionante" recibir tanto cariño por "cuidarles". La realidad "nos ha hecho más visibles, pero siempre hemos estado ahí". Considera que la población está concienciada y recalca: "Gracias a la colaboración ciudadana podemos hacer bien nuestro trabajo". Lanza su "aplauso personal a todos los que se están quedando en casa".

8. Eduardo Baute (enfermero de Urgencias Hospital del Sur).

Este profesional siente "orgullo" de ser enfermero ante tanto reconocimiento porque da a entender que "lo estamos haciendo bien" en medio de esta pesadilla. Cree que este es su trabajo, pero ayuda en lo moral. Entiende que "hay más conciencia de quedarse en casa ante el aumento progresivo de casos y fallecidos. Habría muchísimos más sin el confinamiento". Pide salir solo lo justo de casa y cumplir las medidas sanitarias porque "si todos ponemos de nuestra parte, unidos saldremos de esta".

9. Ana María Rodríguez (jefa de Lencería de La Candelaria).

Valora "un trabajo colectivo desde el último trabajador a la Gerencia". Por eso representa a todos sus compañeros. Ellos se ocupan de que la ropa esté lista. Podría quedarse en casa, pero ha decidido acudir cada día "a la guerra, porque esto es una guerra". Le emociona la respuesta de la gente a su trabajo. Califica de "muy duro" venir cada día porque "tú sabes que llegas limpio de casa pero no cómo vas a salir". Cree que "ha habido un aumento progresivo de la conciencia ciudadana y se nota en las calles vacías". Señala que "sobrecoge ver vacío y en silencio el Hospital cuando es un lugar de bullicio diario". Sentencia: "De esto vamos a salir porque vamos de la mano con la gente".

10. Manuel de Prado (enfermero en Tenerife II).

"En mi trabajo el material de protección no abunda, aunque nos vamos apañando", afirma Manuel. No tiene miedo a la infección, porque, "cuando trabajas en sanidad esa posibilidad va en el sueldo". "El porcentaje de infectados comprobados en España no llega al dos por mil de la población, ni al dos por ciento en la peor de la estimaciones de casos no diagnosticados". Este profesional espera que "la crisis económica a la que nos enfrentaremos después no mate más que el coronavirus, en eso también hay que pensar mucho". Opina que, sin duda, habrá un antes y un después. "Creo que los cambios sociales que se pueden esperar son mayores que los que trajo el 11-S ". Valora que los aplausos están bien, "pero quisiera hacerlos extensivos a todas las personas que nunca esperaron tener un papel tan relevante en nuestra sociedad, todos los que se encargan de la gestión alimentaria, desde los transportistas hasta los reponedores de supermercado, pasando, por supuesto, por los esforzados tenderos de barrio".

11. Sandra Ramos (operaria de limpieza del HUC).

A Sandra Ramos estos días le han servido para corroborar la importancia de su servicio dentro del Hospital Universitario de Canarias. "Esto es una cadena y nosotros somos imprescindibles", sostiene la operaria de limpieza, que, junto a sus compañeras, ha pasado horas dentro de las habitaciones donde han estado ingresados pacientes positivos en Covid-19 para limpiar hasta las paredes. "Somos las que más tiempo pasamos con los pacientes, e intentamos animarles", explica. Están siendo días muy duros en los que los sentimientos están "a flor de piel". Y lo sabe porque cada vez que escucha los aplausos de los pacientes desde sus ventanas a las siete de la tarde, se emociona.

12. Alejandro Bonnet (maestro taller psicopedagógico San Juan de Dios).

Alejandro ha convertido uno de los espacios de hospital en una "granja" de impresoras 3D, donde se están elaborando viseras o pantallas de protección para el personal sanitario. "Los días normales imparto talleres de cerámica, nuevas tecnologías y reciclaje, hoy estoy alejado de mis chicos, de mis compañeros, de mi familia, pero lo estoy porque creo que haciendo lo que hago puedo ayudar a más personas, especialmente a los que nos cuidan", señala con convicción. Agradece a todas aquellas personas, empresas, colectivos, centros educativos o particulares que han aportado "su granito de arena".

13. Natalia Lorenzo (voluntaria de Cruz Roja en La Gomera).

Natalia es de esos cientos de voluntarios de Cruz Roja que en estos días también están en primera línea de la lucha contra el coronavirus. Cuidan aspectos importantes, como que no les falten alimentos a colectivos vulnerables, principalmente los mayores. "Estamos entregando kits de eficiencia energética y asesorando a las familias para que no suba la factura de la luz, que puede ser hasta 26 euros superior en estos días", destaca. También ella y compañeras psicólogas trabajan "en estos duros momentos haciendo llamadas a nuestros usuarios y socios para darles pautas de prevención, asesorándolos y haciendo un acompañamiento psicológico".

14. Jacob Lorenzo (director del Instituto de Enfermedades Tropicales).

Toda la rutina a la que estaba acostumbrado el responsable del centro ha cambiado radicalmente en estas semanas. "Tenemos más carga de trabajo puesto que colaboramos con varias entidades y con el personal de la Universidad de La Laguna en el diagnóstico del Covid-19", afirma el científico. Lorenzo resalta que es todo un orgullo poder poner su granito de arena, "aunque sea modesto" para ayudar. Y ese esfuerzo titánico de todos los que están "en primera línea de fuego", ya sea personal sanitario, de limpieza, conductores, obreros o personal de supermercados, se está viendo recompensado con el apoyo de toda la sociedad. "Esos aplausos van para todos los que están tirando del resto, que es un gran sacrificio y además corren un riesgo para que el resto pueda quedarse en casa y que esta epidemia pare", señala el investigador, que se muestra maravillado de ver "cómo la sociedad se compromete y trabaja en equipo para que esto acabe cuanto antes". Para él, que Canarias esté entre las comunidades menos afectadas por esta pandemia tiene relación justamente con el compromiso ciudadano.

15. Elena Espinosa (jefa de Anestesiología de La Candelaria).

"Emocionada y agradecida". Así recibe esta doctora las muestras de reconocimiento y apunta a la solidaridad como "algo positivo". No solo los aplausos, sino "las múltiples donaciones y propuestas de apoyo que nos brindan. No nos sentimos solos". Ve una mejora en la conciencia "progresiva. De la gente y nuestra porque veíamos este problema como algo lejano al principio". Valora que "los canarios lo están haciendo bien quedándose en casa". Los sanitarios "estamos preparados".

16. Mario Cyrus (residente de la UVI del HUC).

Si para un profesional experimentado esta situación es desbordante, estos días hay que ponerse también en la piel de quienes aún están en plena formación. Es el caso de Mario Cyrus, residente de medicina intensiva de segundo año en el HUC. Admite que se le hace "un poco difícil" el trabajo, porque hay veces que quiere ayudar pero se ve limitado por su formación. "Hay una diferencia importante en el nivel de trabajo, pero todo el mundo ha puesto más de su parte para llevar la situación de la mejor manera posible", afirma. "Estamos haciendo lo humanamente imposible para superar esta situación", dice el residente, que insta a la población a "cumplir su papel" y quedarse en casa.

17. María Concepción Pérez (enfermera de la UCI de La Candelaria).

Desempeña su profesión desde 2001 y nunca se había visto tan valorada como ahora. Enfermera de vocación, cree que su esencia es cuidar pero "¿quién ha cuidado de mí hasta ahora?" Esos aplausos diarios hacen que mantenga la energía necesaria para ganar esta batalla. Salvo casos excepcionales piensa que la gente es consciente de la importancia de este gran problema llegado por sorpresa. "Solo pedimos que se queden en casa". Tiene la esperanza de salir adelante, aunque "todo va a depender de nuestras acciones. De ser responsables en el confinamiento para frenar el virus". En el otro lado, "nuestro equipo se deja la piel en cada turno. Unidos podemos vencer esta guerra y volver a la normalidad".

18. Juan Gómez Sirvent (jefe de Infecciones del HUC).

Lo que está viviendo el jefe de servicio de Infecciones del HUC, Juan Luis Gómez Sirvent, es una verdadera montaña rusa de emociones. "Puedes estar supercontento, te da un subidón y de repente entran 12 personas en Urgencias y de ese pico vuelves al valle", señala. Para el facultativo, el hospital ha estado teniendo una respuesta "admirable": todo el mundo se ha volcado por el problema y ha aportado lo que puede a la causa. "Todos tenemos un papel muy relevante y todos nos podemos ayudar". A su juicio, "la colaboración y el entendimiento" de otros pacientes y la ciudadanía en general es "altísima". "No tengo ninguna duda: esto va a acabar y se va a arreglar", afirma el facultativo, que ve con optimismo la próxima creación de una vacuna.

19. Kelly Dreisömer (farmacéutica).

Como una de las primeras entradas de la sanidad, las farmacias están muy expuestas al virus. La farmacéutica Kelly Dreisörner lo tiene siempre en mente. "Aquí nos llega cualquiera y puede tener Covid-19". En los últimos días, no obstante, la seguridad se ha reforzado en su trabajo habiéndose instalado una mampara y señalización para que las personas conozcan cómo deben actuar. Además, están tomando medidas de seguridad, como desinfectar el dinero. "Los dejamos unos minutos en lejía y los guardamos en la caja, así evitamos al menos que pueda haber contagio por esa parte", insiste. Afirma que la gente "está respetando" cada vez más y señala que los aplausos son una iniciativa muy "emocionante".

20. Sergio Velázquez (enfermero de UVI del HUC).

"Es un antes y un después en nuestra vida y en nuestra forma de trabajar". Así representa Sergio Velázquez esta pandemia. "Al principio lo veíamos lejano y ahora nos topamos de bruces con que es una realidad y tenemos que actuar", señala el enfermero de la UVI, una de las zonas calientes del Covid-19. Confiesa sentirse sorprendido por la reacción popular, pues siempre se han sentido olvidados y estos últimos días han sentido el calor y el apoyo de la población. "La incertidumbre, el miedo y la preocupación se hacen mucho más llevaderos. Reconforta y dan ganas de ir a trabajar". Pese a lo duro del momento, llama al optimismo. "Hemos visto a pacientes salir, se está haciendo un esfuerzo enorme y vamos a salir todos juntos de esta".

21. Sandra Hernández (enfermera en el Hospital de El Hierro).

Sandra afronta cada jornada "con fuerzas y con ánimo de que todo salga bien y con la esperanza de que todo termine pronto". Aunque sea una isla pequeña, les llega el apoyo de la sociedad a los sanitarios. Reconoce que son unos cuantos los mensajes que recibe y "muchos los pacientes que se acuerdan de ti". Se trabaja "con mucho respeto, porque el material es escaso", pero a pesar de eso no siente miedo porque "intento cuidarme lo máximo posible y ser prudente", asegura.

22. Dailos Gómez (limpieza de la UVI de La Candelaria).

"El personal sanitario cura y el de limpieza mata al enemigo". Es la primera reflexión de Dailos, que admite que "siempre es bonito que reconozcan tu trabajo". "Todos vamos a una", subraya. Cree que "la población está concienciada. Los jóvenes debemos cuidar nuestro legado, los mayores, y la mejor opción es quedarnos en casa". Garantiza que "estamos en buenas manos". Su mensaje: "dar las gracias a todo el personal. En la UCI no hay personas ni trabajadores, hay corazones".

23. Estela Ferrer (coordinadora de Lavandería del HUC).

Al principio todo fue muy estresante, les faltaba información y tuvieron que ir asimilando poco a poco lo que pasaba. Ahora "lo llevamos bien", explica Estela Ferrer, coordinadora de Lavandería del HUC, que señala que hay días que sienten que es "increíble" lo que están viviendo. Además entiende que "saldremos adelante, solo hay que ponerle ganas". La tarea de ella y sus compañeros es fundamental pues son las encargadas de mantener todos los uniformes de sus compañeros a punto para que puedan usarlos cada vez que lo necesitan. El volumen de trabajo se ha duplicado durante estas semanas para ellas: ha pasado de procesar 3.000 uniformes a hacer más de 6.000 diarios. Ferrer hace hincapié en el gran apoyo de todos los trabajadores del centro hospitalario, porque realmente están formando "una piña". Remarca especialmente el trabajo de mantenimiento, que "siempre tienen las máquinas a punto para que todo salga bien".

24. Tomás Febles (director médico de Hospiten Sur).

"Estamos viviendo una crisis sanitaria y social sin precedentes", constata el cardiólogo Tomás Febles, para quien "esto nos afecta profesional y personalmente a todos". Respecto a los aplausos que recibe el personal sanitario cada tarde desde ventanas y balcones, así como los gestos de profesionales de la seguridad y las emergencias, este especialista, que también es jefe de la UCI de Hospiten Sur, cree que "es algo muy positivo y anima a mucha gente que en su labor diaria tiene una presión importante". "A los profesionales hay que valorarlos más en su trabajo, ya que somos los más comprometidos ante esta realidad y los que estamos al frente de una situación dramática".

25. Almudena Domínguez (enfermera de quirófano del HUC).

Las iniciativas ciudadanas "emocionan cada día". Lo asegura esta carnavalera, directora de la murga femenina Trikikonas que ha estudiado lo que le gusta y trabaja en ello. "Ayudar es una de nuestras premisas", recalca, pero ahora su labor "se hace más visible". La solidaridad de la población la califica de "inmejorable" por quedarse en casa. "Gracias, gracias y mil gracias" a todos los profesionales que trabajan estos días y a la ciudadanía, "porque "juntos formamos un buen equipo. ¡Un día más es un día menos!".

26. José Bermúdez (enfermero centro salud Puerto de la Cruz).

La gestión del día a día en los centros de salud ha dado una vuelta de 180 grados. Ya apenas pasan pacientes por la puerta de este servicio y el día lo pasan protegidos hasta las orejas para evitar un contagio. Pero no siempre ha sido así, los primeros momentos fueron un verdadero "desbarajuste" que tuvieron que solventar con la experiencia. Bermúdez es positivo y sabe que "esto va a pasar, seguro" y señala la importancia de seguir las recomendaciones del Ministerio de Sanidad. "Por una vez tenemos algo tan fácil para combatir al enemigo invisible, solo tenemos que quedarnos en casa", explica el enfermero. Bermúdez ve con emoción las iniciativas ciudadanas que han surgido por toda Canarias, pero pide una mayor implicación del Gobierno.

27. María José Bolaños (conductora de ambulancia SUC).

María José Bolaños conduce una ambulancia de soporte vital básico del Servicio de Urgencias Canario (SUC). Afirma que "estamos ante una situación de emergencia sanitaria con todas las letras, en la que lo peor es el miedo de la gente, que, amparándose a veces en la falta de información y otras en su exceso, les lleva a cometer errores que les ponen en peligro a ellos, a toda la sociedad y a nosotros en particular". "Me refiero con ello a salir de casa sin ser necesario o a utilizar material que no les hace falta", aclara. Respecto al apoyo social desde todos los ámbitos, agradece mucho el reconocimiento "porque nosotros también tenemos miedo, pero agradecemos más que se conciencien de la gravedad del problema".

28. Esteban Pérez (coordinador de seguridad HUC).

Lleva 40 años trabajando en el HUC y jamás había presenciado algo así. A pesar de la incertidumbre de la situación, Pérez la asume con ánimo, especialmente gracias al cariño y la acogida de la sociedad. "Nos motiva a seguir luchando porque sabemos que no estamos solos", afirma el coordinador de seguridad del centro. Cuando piensa en el apoyo que recibe, Pérez recuerda a su hija, que le dice cada día antes de salir de casa que tenga cuidado, y a los compañeros de la Unidad Militar de Emergencias (UME), junto con los que ha tratado de preservar la limpieza y la seguridad del centro. "Esto es lo que nos toca ahora", advierte. Pero es positivo: "como dicen las noticias, esto nos va a hacer más fuertes".

29. María Isabel de la Rosa (Servicio de Atención Espiritual San Juan de Dios).

Isabel trabaja en el Hospital San Juan de Dios de Santa Cruz de Tenerife, que tiene como objetivo "aliviar el dolor y el sufrimiento que genera toda enfermedad", prestando sus cuidados de manera integral a todas las dimensiones del ser humano". "Desde nuestro servicio -detalla- hemos puesto a disposición de nuestros usuarios la posibilidad de realizar videollamadas a sus familiares a través de dispositivos móviles, con el fin de velar por su bienestar emocional y espiritual, mitigando la ansiedad y confortándoles internamente". Lo que pretenden es "humanizar" este momento histórico, "combatiendo la soledad de nuestros mayores y el aislamiento social, generando en ellos mayor bienestar", destaca María Isabel.

30. José David Suárez (enfermero de la UCI Hospital de La Palma).

David trabaja con el miedo al contagio, "pero no por mí, por mi familia, que son personas con riesgo", puntualiza. Eso ha llevado a que practique el aislamiento en su domicilio. En el trabajo nota el estrés y el miedo por la falta de material, ya que "comparas tu equipo de protección con el de China y esperas que sea suficiente". Lo peor, señala, "es cuando estás con los pacientes, con la puerta cerrada, oyendo tu respiración y administrando la medicación de una manera muy meticulosa, cualquier error puede ser fatal". Lamenta que no exista un protocolo unificado, ya que "no hay un consenso a nivel autonómico. Cada uno implanta sus propios protocolos y formas de trabajar. Y eso también genera malestar". Lo que sí ayuda "es ver a la sociedad volcada con nosotros. Los aplausos, las donaciones, voluntarios, o simplemente con el gesto de cumplir con quedarse en casa".

31. Desirée Yanes (supervisora Enfermería Medicina Interna de La Candelaria).

"Muy emotivo". Así resume esta profesional el apoyo diario que reciben los sanitarios. Incide en que se le ponen los pelos de punta cuando el homenaje coincide con su salida del turno. Pero no solo son los aplausos, sino la red tejida por la solidaridad anónima. Por ejemplo, la de quien redacta cartas que "leemos a los pacientes". Uno de ellos le dijo que "éramos sus ángeles". Ve a la gente muy concienciada con un personal que "lo da todo" y "trabaja en equipo". Está segura de que "vamos a salir". Por eso agradece "todo el esfuerzo de mis compañeros de la primera planta de la Torre Norte".

32. Alberto Aitor Martell (médico en una ambulancia del SUC).

Piensa que "nos encontramos ante una emergencia sanitaria sin precedentes, en la que nuestro sistema cuenta con grandes profesionales que dan lo mejor de sí para hacer frente a la pandemia". Estima que la población debe ser consciente de la situación real que estamos viviendo, y "con ello debemos insistir en que lleven a cabo las medidas de confinamiento para poder parar esta situación". En cuanto a las importantes muestras de solidaridad de la ciudadanía, indica que "cada día que vemos y escuchamos los reconocimientos sociales, estos nos dan aliento y fuerza para poder seguir trabajando contra el coronavirus Covid-19". Sin embargo, tiene muy claro que "el mayor reconocimiento social es el que puede realizar la población con las medidas de confinamiento determinadas por el Gobierno central, porque, a día de hoy, es la vacuna que poseemos el personal sanitario para poder parar la propagación y disminuir el número de pacientes que enferman y mueren en nuestra sociedad".

33. Kiria Hernández (médico en ambulancia medicalizada en La Palma).

Kiria Hernández afronta estos días de trabajo "con ganas, es maravilloso saber que podemos salir a hacer lo que nos gusta y ayudar a la gente. Saber que en medio de lo malo formamos parte de esto". Al trabajar en una ambulancia, a él y a sus compañeros les llegan "pocos homenajes", al estar ubicados en una nueva base con su vehículo. Reconoce que en una ambulancia siempre se trabaja con miedo, "es algo normal", manifiesta, ya que "nos enfrentamos a un enemigo no bien conocido", aunque también es cierto que "eso pasa siempre en las ambulancias, que no sabemos a qué salimos". Son los primeros en llegar a las casas de los afectados por coronavirus, y eso hace que trabajen "en condiciones complicadas y escenarios diferentes cada vez".

34. Gianfranco Bagnaressi (subdir. Ingeniería Electromedicina y Seg. Hunsc).

Italiano residente en Tenerife, con dos décadas de trabajo en el Hospital Nuestra Señora de La Candelaria, como responsable de la logística opina que España va con ocho días de retraso respecto a su país, según le informa su familia. No está en primera línea, pero se siente "emocionado y agradecido" cuando percibe el apoyo social tanto en los homenajes cono en el ofrecimiento solidario para ayudar de personas e instituciones. Valora la respuesta de la ciudadanía que nota en las calles vacías cuando va y vuelve del trabajo a casa. Enfoca la principal esperanza en "la ilusión y la energía que ponemos todos. Este esfuerzo común dará resultado y ganaremos la batalla más pronto que tarde".

35. Mar Martín (jefa de Medicina Intensiva de La Candelaria).

Muy emocionada al hablar del apoyo recibido, esta doctora explica cómo esta semana coincidió en una videoconferencia a nivel nacional de compañeros de UVI con el inicio del homenaje y "fue muy gratificante poder vivirlo". Considera que "en una situación de estrés tan enorme nos da fuerza tanto apoyo, no solo desde los balcones, sino ofreciéndose para lo que haga falta". También porque "la sociedad se compromete a no salir de casa para superar esta situación tan seria. Cada vez veo menos gente en la calle". Ofrece su reflexión: "Esta es una guerra que sólo ganaremos si somos todos un equipo. Yo no solo soy médico sino celador, enfermero, auxiliar,...".

36. Adolfo Cordobés (técnico de Laboratorio Microbiología del HUC).

Adolfo Cordobés forma parte de uno de los servicios a menudo silenciados, pero que en esta crisis ha pasado a formar una de las piezas más relevantes de este puzle. El Laboratorio de Microbiología es el que está continuamente determinando qué persona es positivo en Covid-19 y cuál no. En estas dos semanas su trabajo ha aumentado exponencialmente aunque solo se dedique a eso. De hecho, han ampliado los horarios y diariamente realizan unas 300 PCR, muy lejanas de las 20 que hacían antes. "El trabajo es muy intenso, pero sentimos que estamos colaborando", explica Cordobés, que señala que la situación está siendo "ilusionante y estresante" a partes iguales. Además, afirma que se sienten valorados por la población gracias a sus aplausos diarios y a sus donaciones. "Yo noto cada vez más concienciación pero sin entrar en el alarmismo", afirma el microbiólogo, que da "ánimos y esperanza a la población".

37. María Anelia González (auxiliar de enfermería en UCI La Palma).

Para María, estos días están suponiendo una carga de estrés "muy grande". Aunque cueste enfrentarse a muchas situaciones difíciles cada día en la atención a personas con Covid-19, tiene claro lo importante del trabajo que están realizando y la necesidad de seguir apoyando a los pacientes para que superen la enfermedad. Agradece todas las muestras de apoyo de la sociedad y también todas las donaciones de material que están permitiendo que afronten el trabajo con mejores garantías. También reconoce que el miedo no lo tiene por ella, "lo tengo por la posibilidad de contagiar el virus a mi familia".

38. Juan M. González (jefe de Cocina en La Candelaria).

Su voz es la de los 40 trabajadores, entre jefes, cocineros, pinches y servicio de limpieza que forman el equipo de cocina del Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria. Valora: "Estamos aquí y aquí vamos a seguir para contribuir con nuestro grano de arena a salir de esta situación extraña y única". Resalta el trabajo diario de todo el personal y con una palabra define el apoyo popular recibido: "Reconforta". Piensa que la ciudadanía cumple cada vez más con las medidas de protección, algo fundamental ante esta situación "grave". Desde la cocina de La Candelaria, un mensaje: "Mucho ánimo a todos y a seguir con moral porque vamos a salir todos juntos".

39. Juan Francisco Díaz (celador en La Candelaria).

Hace casi 40 años que ejerce su profesión y considera que "el apoyo del pueblo" sirve para levantarse con más ganas y "luchar por todos. Estamos muy agradecidos". Entiende que la población actúa muy bien y respeta para no colapsar las urgencias. "Nunca había vivido una cosa así", resume Juan, murguero de La Traviata y del barrio chicharrero de El Toscal. Tiene la esperanza de que pronto "salgamos y nos podamos volver a dar ese abrazo". Concluye: "Quédate en casa, gracias".

40. Geraldine Pérez (enfermera en la UCI de La Palma).

Geraldine Pérez es enfermera en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General de La Palma. Reconoce que estos son días que se viven con ansiedad, sobre todo "por lo que supone ponerse un equipo de protección EPI". Lamenta que tenga que morir tanta gente por esta pandemia para que se valore el trabajo de los sanitarios. Con 15 años de experiencia en el servicio, asegura que están acostumbrados a trabajar con pacientes contagiosos. Agradece las muestras de apoyo de particulares y empresas, "que nos han hecho alguna que otra donación", pero también quiere recordarles que "estamos dando lo mejor de nosotros, incluso arriesgando nuestra salud y la de nuestras familias, porque es nuestro trabajo, el que elegimos". "No somos héroes ni nada parecido, sólo realizamos nuestro trabajo", sentencia Geraldine.

41. Jesús Airán Acosta (enfermero ambulancia medicalizada).

Jesús Airán Acosta manifiesta que nadie se imaginaba que pudiéramos vivir una situación como la actual, "en la que estamos haciendo una medicina de guerra poniendo todos los recursos del sistema a funcionar al máximo llevando al límite al personal y al propio sistema". Considera el enfermero que "lo positivo, dentro de este cuadro tan negativo y duro, es que, como sanitario, estoy orgulloso de todos los compañeros del sector en todo el mundo y de haber elegido esta profesión". El esfuerzo está siendo unánime y brutal y está permitiendo que salga el mayor de los ingenios que "tenemos dentro, realizando muchas aportaciones que de otra forma no hubieran salido", indica. "Cuando pase todo esto podremos valorar si se pudo hacer mejor o de otra manera, pero lo cierto es que esto nos va a enseñar que tenemos que estar preparados para incidentes que no son habituales porque son los que van a poner en riesgo lo que hemos construido", matiza el profesional. Aclara que el reconocimiento se agradece y motiva para seguir adelante, "pero no considero que los sanitarios seamos más héroes que cualquiera de los otros sectores profesionales que también lo están dando todo en esta emergencia". "Si ese reconocimiento sirve para que le demos el valor real al trabajo que realizamos día a día y se consiga que el sistema sanitario mejore, el esfuerzo habrá valido la pena...", concluye.

42. Francisco Fuentes (enfermero en la cárcel Las Palmas II).

Su tarea ya es dura en el interior de una cárcel, pero estos días adquiere una mayor dificultad que afronta con más moral cuando comprueba el apoyo de la gente. Este sanitario de prisiones por vocación, tinerfeño pero que presta servicios en la cárcel Las Palmas II, se sorprendió el primer día con una respuesta que "nos llena a todos los compañeros ". Supone "una ayuda moral" después de turnos de 12 horas. Fuentes cree que "los ciudadanos cumplen cada vez más con las normas para combatir el virus". Introduce una reflexión como padre separado: "Hay quien insiste en mantener las condiciones del régimen de visitas en la custodia compartida y es negativo". Lo deja claro porque los niños son vectores de la enfermedad -no se contagian pero la transmiten- y apostilla que "no es bueno que cambien de entorno con frecuencia". Su mensaje a la población es que cada uno luche contra el Covid-19 con sus medios: "Nosotros desde dentro y la gente quedándose en casa. Si es así, de esta salimos seguro".