Solo puede ir a comprar un miembro de la unidad familiar o domicilio. Tanto para desplazarse, a pie o en vehículo, como para estar dentro del supermercado . Así es la norma y así la cumple la mayoría, pero basta estar unos minutos en un aparcamiento de un centro comercial, como este de Barcelona, para encontrarse con desplazamientos en pareja, que se justifican con situaciones que se se admiten en el decreto del estado de alarma para el viaje conjunto de dos compañeros de trabajo que van y vuelven de su jornada laboral.

No está permitido, lo mismo que las parejas que acuden individualmente en coches diferentes o cada uno con su carro. Solo se puede ir acompañado de menores y adultos dependientes. Y, por supuesto, evitar concentraciones y conversaciones a escasa distancia. Un sábado que ha amanecido, también, con largas colas en algunos supermercados de Bilbao y Vigo.