Dos empresarias, una científica, una doctora, una deportista, una soldadora, una periodista y una magistrada. Las mujeres canarias empiezan a copar esos espacios antaño ocupados únicamente por hombres y desde de sus puestos -de mayor o menor responsabilidad- intentan visibilizar su papel, reivindicar su validez para desempeñar un cargo y demostrar que, aunque la sociedad no les haya facilitado un hueco, ellas lo están ganando. Como homenaje al Día Internacional de la Mujer que se celebra hoy, EL DÍA ha querido que ocho mujeres isleñas de distintos sectores tengan un espacio para poder diagnosticar la situación en la que actualmente se encuentra la mitad de la población en España. A pesar de que muchas están de acuerdo en que la batalla contra el machismo estará ganada cuando no haga falta reivindicar este día, coinciden en que aún queda un largo camino por recorrer.

En España las diferencias entre hombres y mujeres son visibles en el acceso al trabajo, en el progreso académico, en la pobreza, en el reparto de tareas en casa, en el salario e, incluso, en el poder seguir o no con vida. Los datos lo confirman. El 89,4% de los hombres con hijos de menos de 12 años están empleados -más incluso que cuando no tienen hijos-. Por el contrario, para las mujeres, esto supone un hándicap que rebaja su tasa de empleo seis puntos, del 74,3% al 68,2%.

La maternidad no solo condiciona el acceso el empleo, también el progreso en él. En la carrera investigadora solo el 21% de las cátedras están ostentadas por mujeres y es básicamente porque la cantidad de tiempo que se debe invertir para llegar hasta ahí es incompatible con la crianza de un hijo. La desigualdad parte directamente del uso del tiempo libre, porque como señala el Ministerio de Igualdad, mientras las mujeres pierden cuatro horas y siete minutos en las labores del hogar y la familia, los hombres dedican menos de dos horas a lo mismo. Entre todas las actividades que se realizan en casa, destacan las no especificadas, aquellas que no tienen que ver con limpiar, comprar, cuidar a los hijos o cocinar. Para este tiempo "libre" en casa, los hombres tienen 40 minutos pero las mujeres solo 15.

Para combatir esta enraizada desigualdad social, las mujeres entrevistadas solo ven una alternativa clara: la educación. Luchar por un sistema educativo igualitario es clave para lograr un verdadero cambio social. Hoy la reivindicación de la mujer saldrá a la calle, en Tenerife será a las cinco de la tarde en la Plaza Weyler. A ella está invitada toda personas que desee una igualdad plena que no diferencie por el sexo que se le concedió al nacer.